
Desde distintos sectores y con actores de todo tipo, se han ejercido presiones a concejales y el Municipio de la Ciudad Jardín con el objetivo de conseguir el millonario contrato.
Un intenso lobby y una sospechosa presión estarían recibiendo las últimas horas varios concejales de Viña del Mar para conseguir que se ponga nuevamente en tabla la votación de la millonaria licitación de las cámaras de seguridad de la comuna, la cual beneficiaría directamente a la empresa GlobalLink Chile Telecomunicaciones S.A., en unión temporal de proveedores (UTP) con Alguien Te Cuida SpA.
La Ciudad Jardín y su Municipio siempre han sido un verdadero botín para una serie de personajes que hacen un intenso lobby para favorecer a una u otra empresa en millonarias licitaciones, como es el caso de las cámaras de televigilancia.
El mejor ejemplo es lo sucedido en esta última licitación, donde extrañamente concejales de derecha han votado a favor de adjudicar a la UTP de GlobalLink Chile Telecomunicaciones S.A y Alguien Te Cuida SPA, a excepción de la concejala Antonella Pecchenino, que rechazó; y Antonia Scarella, que se abstuvo de la propuesta.
Días previos a esta votación, una serie de personajes, en citas llevadas a cabo en casas de Viña del Mar y Concón, se habrían reunido con el propósito de articular ciertas presiones para conseguir que la empresa en cuestión pudiera quedarse con el millonario contrato. No se descarta que incluso exista una estrategia comunicacional para crear ahora una sensación de inseguridad en la Ciudad Jardín y así presionar a las autoridades para que se vuelva a votar la misma licitación en el Concejo Municipal.
No podemos dejar de contextualizar que la misma empresa GlobalLink era la que tenía el manejo de las cámaras de seguridad en la última época de Virginia Reginato en Viña del Mar. Cuando llegó Macarena Ripamonti a la administración, justamente la primera medida fue sacarlos y adjudicar a la empresa Ingesmart.
Por este motivo, poco se entiende que hoy se busque insistir nuevamente en una empresa que ya fue desechada en el pasado. Sin embargo, el intenso lobby que se está realizando llega a ser agobiante. Esta presión involucraría a diversos actores conocidos en el ambiente político de derecha, sobre todo, muchos ligados entre sí y muy cercanos, una especie de «Club de Toby» del poder, donde se “jactan” de sus andanzas.
Lo que se pretende instalar es que Viña del Mar se quedó sin cámaras desde este 1 de julio. Sin embargo, Puranoticia.cl pudo corroborar que esta situación no es real. Primero, porque independiente de cualquier contrato, trato directo o licitación, en la ciudad hay operativas 80 cámaras permanentes y en puntos estratégicos. De hecho, estas mismas son las que han servido como instrumento de prueba ante el Ministerio Público en distintos delitos ocurridos en la comuna.
Además, en la Ciudad Jardín se está en plena ejecución del plan «1000 Cámaras para Viña», que ya suma más de 850 equipos instalados. Este avance ha sido posible gracias a la colaboración con los vecinos en los barrios de la ciudad, al financiamiento del Gobierno Regional, los Fondos de Inversión Social (FIS) municipales, y al trabajo estratégico con Carabineros y el Ministerio de Seguridad Pública.
Tras la votación en contra del millonario contrato de la última licitación, las presiones se duplicaron en el entorno de la alcaldesa Macarena Ripamonti y en los concejales que votaron en contra. Sumado al intenso lobby que estaría realizando un viejo conocido de la política comunal de derecha, ahora se suma la propia empresa Ingesmart que, al ver que Viña no tendrá operativa las 120 cámaras en cuestión, les envió una carta a los concejales y a la propia jefa comunal para que continuaran con el servicio vía trato directo, el cual sobrepasa los 2.300 millones, ante lo cual Ripamonti se opone tenazmente.
Macarena Ripamonti sostuvo al respecto que “en ningún caso una empresa puede ser favorecida irregularmente y observamos con preocupación ciertos hechos que podrían apuntar justamente en esa dirección para obtener un trato directo. El Municipio no pagará ni un peso de sobreprecio por el servicio. Nuestra convicción es clara: la seguridad de la ciudad no puede estar sujeta a presiones indebidas de ninguna empresa ni autoridad. Por eso, hemos solicitado que los hechos sean revisados con total transparencia y apego a la ley”.
Con las presiones del lobista por un lado y las de la empresa incumbente por otra, lo cierto es que la administración Ripamonti ha decidido velar por los intereses de las arcas municipales y que el no tener cierta cantidad de cámaras operativas por unos meses no se transforme en la excusa para salir a despilfarrar dineros fiscales.
“El Municipio no pagará ni un peso de sobreprecio”, dijo Ripamonti quien, además trabaja arduamente con su equipo para levantar durante julio un nuevo proceso licitatorio que le permita justamente acercarse a los montos fijos por cámara que gastan mensualmente municipios grandes como Viña del Mar. El equipo técnico municipal está observando procesos de iguales condiciones en Las Condes, Providencia, Vitacura, Ñuñoa y La Florida, por poner ejemplos, para abrir justamente el abanico de empresas que puedan participar y, al mismo tiempo, cuidar las arcas municipales.
“No puede ser que Viña pague más caro un punto de cámara que una comuna de Santiago”, indicaron algunos concejales que se opusieron a adjudicar la última licitación y llaman a no caer en la especulación de decir que “Viña no tiene cámaras”. Cabe hacer presente que el Municipio de la Ciudad Jardín ha reforzado sus sistemas de seguridad con más camionetas, motos, guardias civiles y sus 80 cámaras operativas.
Se espera que el Municipio de Viña del Mar trabaje en nuevas bases y que con ello pueda cuidar las finanzas de la comuna, haciendo una administración responsable, sin aceptar presiones de ningún tipo, y donde sólo se benefician unos pocos.
PURANOTICIA