En prisión preventiva quedaron dos de los tres detenidos por su presunta responsabilidad en los hechos acontecidos el pasado 3 de abril en las comunas de Olmué y Nogales. La tercera imputada, en tanto, quedó con arresto domiciliario, por su presunta complicidad.
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El Ministerio Público reveló una serie de antecedentes en torno al planificado robo con violencia e intimidación que afectó al Banco Estado de Nogales el pasado 3 de abril, hecho que incluyó el secuestro de un trabajador de la sucursal y de su familia en Olmué.
Todo comenzó pasadas las 7:00 horas de la mañana cuando unos cinco delincuentes ingresaron armados, con chalecos antibalas y sus rostros cubiertos al domicilio de un ejecutivo de la entidad bancaria, ubicado en la comuna de Olmué.
"Me dijeron que no les interesaba nada de mi casa, sino que venían por el banco", relató el afectado, junto a indicar que le mostraron una foto donde aparecía junto a su hija, en señal de amedrentamiento. "Queremos las llaves de la bóveda", le dijeron, para luego subirlo a un automóvil con una bolsa en la cabeza; mientras que a su esposa y tres hijas (gemelas de 5 meses y una niña de 3 años) la subieron a otro vehículo.
Ya en la sucursal del Banco Estado, los delincuentes intimidaron con un arma de fuego al guardia de seguridad y se dirigieron hacia una trabajadora que tenía las llaves de la bóveda. Así fue como lograron sustraer más de $100 millones, los cuales subieron a uno de los dos automóviles en los que llegaron y huyeron en dirección desconocida, no sin antes liberar a la familia del trabajador secuestrado desde la comuna de Olmué.
Por este planificado atraco un sujeto ya se encuentra en prisión preventiva, mientras que el martes 9 de mayo, efectivos del OS-9 de Carabineros lograron detener a otras tres personas, las cuales fueron puestos en condición de imputados en esta causa: Óscar Lobos Barahona y Bastián Córdova Vera, como autores de los delitos de secuestro, robo con violencia, tenencia ilegal de armas y de municiones expansivas, y receptación; y Camila Bravo Valenzuela, como cómplice de robo con violencia.
Los sujetos fueron formalizados en el Juzgado de Garantía de Limache, donde se revelaron nuevos antecedentes en torno a este hecho que conmocionó a la región de Valparaíso. Y es que según el fiscal Benjamín Santibáñez, de la Unidad Regional de Análisis Criminal y Focos Investigativos, el asalto fue planificado al menos por un mes, incluyendo un detallado seguimiento a distintos funcionarios de la entidad bancaria de Nogales, con el objetivo de conocer sus movimientos.
El persecutor señaló tras la audiencia de formalización que los individuos "venían planeando esta situación hace bastante tiempo. Tenemos antecedentes, más o menos, del 3 de marzo. Efectuaban vigilancia a la casa del trabajador en Olmué, al guardia que vivía en Puchuncaví y a otras funcionarias del banco, a las que estaban siguiendo. Sacaban fotografías para ver todo el movimiento".
Cabe hacer presente que los dos hombres quedaron con la medida cautelar de prisión preventiva, mientras que la mujer deberá permanecer con arresto domiciliario, debido a que su participación fue secundaria en el atraco del 3 de abril.
Varias pistas fueron las que recopilaron los funcionarios del OS-9 de Carabineros en el marco de la investigación, donde una de las que más llamó la atención fue que uno de los detenidos (Óscar Lobos Barahona) compró una casa por $5 millones tan sólo 48 horas después de haber cometido el violento secuestro y asalto en el banco.
"Lobos hizo la compra de una casa prefabricada el 5 de abril. Es decir, dos días después del robo invirtió 5 millones de pesos en la adquisición de una propiedad", informó el fiscal Santibáñez, quien agregó que la compra se realizó en efectivo, según la información proporcionada por la empresa que le vendió la vivienda.
Otro detalle respecto a Óscar Lobos fue que se logró comprobar que presenta una cojera en su pierna, tal como lo demostraron las imágenes del día del atraco en Nogales. "Existe una imagen de video en la cual aparece Lobos cuando sale del banco caminando. Lo hace claramente con cojera y el día de la detención se logra establecer que efectivamente el imputado camina con esta cojera", dijo el fiscal Santibáñez.
El detenido relató al Ministerio Público que presenta esta cojera debido a que hace un tiempo recibió un disparo en la cadera que lo dejó con esta condición.
El mismo día de los hechos (3 de abril), la policía halló en uno de los automóviles que participó del ilícito un teléfono celular, el cual sería propiedad de Camila Bravo, pareja de Bastián Córdova, ambos detenidos e imputados por la Fiscalía.
Tras revisar las redes sociales de los involucrados, se logran apreciar una serie de fotografías en las que Óscar Lobos aparece utilizando la misma ropa del día del secuestro y posterior robo con violencia. De esta manera, específicamente coinciden una chaqueta, un pantalón y las zapatillas, las mismas que usaba el día de la detención.
Además, otra fotografía obtenida por las cámaras de televigilancia del Banco Estado de Nogales el día 6 de marzo (cerca de un mes antes del robo) dan cuenta del imputado al interior de un automóvil Kia, las cuales fueron contrastadas con las redes sociales de Óscar Lobos, confirmando que se trata del mismo vehículo.
Cabe hacer presente que en el domicilio de los involucrados también se hallaron armas, cargadores y municiones, probablemente utilizadas el día del atraco en Nogales.
PURANOTICIA
