El término de la manifestación se produjo luego de una reunión que los choferes sostuvieron con Carabineros y tras llegar a un acuerdo respecto a medidas para mejorar las condiciones de seguridad de los trabajadores.
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Los conductores de los recorridos 402 y 406 de la locomoción colectiva del Gran Valparaíso volvieron a sus funciones tras un día de paro en protesta por la falta de seguridad, luego de sufrir el martes pasado un nuevo ataque a pedradas en Viña del Mar.
El término de la manifestación se produjo luego de una reunión que los choferes sostuvieron con Carabineros y tras llegar a un acuerdo respecto a medidas para mejorar las condiciones de seguridad de los trabajadores.
En una primera reunión participó personal de la delegación presidencial regional, Carabineros y el seremi de Transportes, Benigno Retamal, quien informó que “pudimos avanzar en medidas concretas, Carabineros va a tener mayor presencia en la zona para efectos de coordinar acciones inmediatas que den mayor seguridad a los conductores y a los vecinos y vecinas que ocupan las micros”.
“Así que reiteramos a la comunidad el deber que también tienen ellos para denunciar estos hechos y eso también nos ayuda a nosotros para poder tomar acciones más rápidas”, añadió la autoridad, según consigna radio Biobío.
En una segunda reunión entre los conductores y la policía uniformada se acordaron otras medidas para trabajar en conjunto en el tema de la seguridad, especialmente en un sector, que los choferes califican de “punto rojo”, y que corresponde a los sectores de los cerros Los Placeres y Rodelillo.
Eduardo Guerra, presidente del sindicato de las líneas 402 y 406, manifestó que “quedamos de trabajar en conjunto para solucionar todos los problemas que hay ahí”.
“Lo mínimo que le pedimos se cumplió, como es que estuvieran dando ronda, que estuvieran en un punto fijo y que estuvieran haciendo patrullaje preventivo en la población donde teníamos problemas”, añadió.
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