En entrevista con Puranoticia TV, el Alcalde de Quillota repasó desde lo que fue la relación de amistad que tuvo con el ex jefe comunal, hasta lo que es actualmente este silencio que se mantienen y que los tendrá enfrentados a los votos en la Elección Municipal de octubre.
Óscar Calderón Sánchez cumplió en junio de 2024 tres años al mando de la Municipalidad de Quillota, entidad que previamente, y por casi 30 años, estuvo liderada por el ya histórico ex alcalde Luis Mella Gajardo. Los caminos de ambos siempre estuvieron a la par, considerando que el primero fue Administrador Municipal del segundo; y que fue justamente el médico de profesión quien le pidió al asistente social que, ante la imposibilidad legal de ir por la reelección, tomara la posta y se postulara como candidato a Alcalde. No obstante, desde fines de 2023 sus caminos se separaron, al punto de terminar su amistad, guardarse silencio mutuo y ahora ser rivales en la Elección Municipal que tendrá lugar el sábado 26 y domingo 27 de octubre.
En entrevista con Puranoticia TV, el Alcalde de Quillota repasó desde la relación que tuvo como uno de los principales aliados de la ex autoridad hasta esta tensa distancia que mantiene con quien ya fue oficializado por el Servicio Electoral (Servel) como carta independiente a competir por otros cuatro años al mando del Municipio de Quillota, donde el incumplimiento de compromisos, la inconsecuencia y hasta las faltas a la verdad dan vida a esta trama que, al menos en el plano electoral, promete ser una de las más reñidas e interesantes en toda la región de Valparaíso para dos meses más.
Fue el 2020, durante el Gobierno del ex Presidente Sebastián Piñera, cuando se promulga la reforma constitucional que ponía límites a las reelecciones de autoridades como alcaldes y concejales (entre otras), razón por la que Luis Mella, alcalde de Quillota desde 1992, tenía cero posibilidades de competir en la Elección Municipal de 2021. Es así como el círculo de hierro del doctor de profesión se reúne para buscar alguna solución, poniendo sus ojos en el administrador municipal de su gestión, su fiel amigo Óscar Calderón, un asistente social que estuvo a cargo de varios quehaceres municipales.
"Luis Mella me convence", reconoce en conversación con Puranoticia TV. Y es que fue el entonces Alcalde quien se acerca a Calderón, le asegura que confiaba en sus capacidades y que reunía todos los requisitos para ser un buen sucesor en el cargo. Con este sorpresivo apoyo, el entonces Administrador Municipal recurre a su familia quienes, pese a exhibirle las complejidades que una decisión como ésta le traería a sus vidas, finalmente decide aceptar la propuesta, pero con dos compromisos: que no tenga que militar en ningún partido político y que al menos pueda competir para completar dos periodos al mando de la Municipalidad, en caso que la ciudadanía así lo quiera.
"Yo pido dos cosas: no militar en partidos políticos, porque he negociado y conversado con representantes, pero no adhiero a partidos políticos como estructura; y segundo, como había un periodo de pandemia, con un proceso de movimientos sociales anteriormente, mi otra conversación con Luis Mella fue que iba a competir por dos periodos en la Alcaldía de Quillota, porque sabía que el primer periodo sería muy difícil, con post-pandemia y un deterioro de la relación humana y el desarrollo de las ciudades, tanto en Quillota como en el país entero", explicó Óscar Calderón.
Y aunque el delfín de Luis Mella ganó la Elección Municipal de 2021 y se convirtió en Alcalde de Quillota, dejándolo además contratado en la Casa de Acogida, todo se derrumbó a fines de 2023 cuando comienzan a sonar fuertemente los rumores de que el popular médico estaría pensando en volver a presentarse como candidato. Entonces, ¿qué pasó en el camino? Según Calderón, "hasta el día de hoy, no tengo idea".
Una de las explicaciones que tiene el actual jefe comunal es que en octubre del año pasado, la fundación Bloomberg Philanthropies y la OCDE reconocen su trabajo y lo eligen para que represente a los alcaldes de Latinoamérica en la COP28 de Dubai. Es ente contexto, sumado a todos los proyectos desarrollados en la comuna, donde comienzan las complicaciones, específicamente cuando se agrega el concepto de integralidad en iniciativas de salud, pero también a nivel social y otras.
De hecho, la distancia la comenzó a sentir en el marco del proyecto estrella que tuvo Luis Mella, pero que nunca vio la luz, pues sólo fue una idea, sin documentos ni nada: el Centro Integral para la Atención de Adultos Mayores de Quillota, el cual se desarrollaría en dependencias del ex Hospital San Martín, que trasladó todas sus instalaciones al nuevo Hospital Biprovincial Quillota - Petorca. "Cuando nos entregan el comodato definitivo para iniciar el proceso completo en el ex Hospital San Martín, ahí empiezo a sentir el distanciamiento", confiesa Calderón en este sincero diálogo.
"Parece que la lógica de ese distanciamiento está en la óptica. Él habla de un geriátrico y yo hablo de un concepto de buen vivir. Un geriátrico es hablar de personas que tienen ya una postración o enfermedad compleja, en cambio yo hablo de adultos mayores activos, que como en los países de oriente se preparan toda la vida para llegar de la mejor manera a ese momento que nos llegará a todos. Ahí pareciera que hay una distorsión, porque el proyecto original siempre habló de una atención integral, nunca de un geriátrico. Y yo soy súper apegado a lo que dijimos en términos metodológicos", agregó el Alcalde de Quillota.
Fue tras este hecho que, entre noviembre y diciembre de 2023, comienza un periodo de silencio de parte de Luis Mella hacia Óscar Calderón, el alcalde. Sin embargo, lo más anecdótico de esta "ley del hielo" se rompe en febrero de 2024 cuando, a través de un mensaje a través de WhatsApp, el ex jefe comunal le dice: 'Óscar, ¿como estás? He tomado la decisión de ir como candidato a Alcalde'. Todo esto, a pesar que desde diciembre venía hablando de que tenía la intención de volver a la política y que aunque no sabía a qué cargo le gustaría postularse, en el fondo todos sabían sus intenciones.
Calderón recuerda todo esto reconociendo que "me pongo muy triste, y lo digo con hidalguía como persona de campo que soy. Sentí pena porque jamás esperé escuchar y leer lo que escuché y leí. Jamás pensé que una relación de trabajo tan estrecha, porque yo fui una de las personas que estuvo a su lado siempre, en términos personales, afectivos y técnicos, y muchos de los logros de su gestión se deben a mi trabajo y al del equipo municipal. Sentí pena, pero uno va fluctuando en los estados de ánimo y de la pena se pasa a los cuestionamientos".
Uno de los rumores que han surgido en la comuna respecto a los verdaderos motivos del alejamiento de Mella con su otrora colaborador y amigo fue que el médico de profesión se sintió excluido al no poder hablar durante una actividad relacionada al ex Hospital San Martín de Quillota, el cual albergaría el Centro para Adultos Mayores de Quillota. Sobre esta especulación, Calderón dijo que "si se enojó por eso, me parece que es la inconsecuencia más grande que tiene él con su discurso".
Más allá de lo bueno y lo malo que pudo haber hecho uno y otro en el ejercicio del cargo como Alcalde de Quillota, será finalmente la ciudadanía, el vecino, el que elija a su nueva máxima autoridad comunal. No obstante a ello, Óscar Calderón enfatizó en las diferencias que tiene con Luis Mella, partiendo por destacar su transversalidad: "Todos tenemos una ideología, pero mi invitación a esta gestión es a ser transversales y sin discriminar, porque todos formamos parte de una misma ciudad", expuso.
Luego precisó que "hay un sello distinto, somos diferentes y puedo decir con convicción que somos distintos. Él también lo ha dicho y lo agradezco. Me preguntaban el otro día cuál era la diferencia entre él y yo, y yo dije que él estuvo casi 30 años y yo llevo 3. Es decir, son 30 y 3, y la diferencia es un cero: yo soy sin cero (N. de la R.: esto, en un evidente juego con la palabra «sincero»). Y lo digo muy responsablemente. Yo no he faltado a ningún compromiso ni a ninguna verdad. Yo digo que controlamos la deuda, él dice que no. También dije me dio pena. Soy sincero".
Calderón también destacó la calidad de médico que tiene Luis Mella, diciendo que "jamás podría decir algo sobre el ejercicio de su profesión porque lo encuentro comprometido y además es muy buen médico. Jamás podría hacerlo. Para mí es mejor médico que Alcalde, pero del ejercicio de su profesión jamás. Ahora, si vamos a entrar en el ámbito de la gestión alcaldicia, conversemos de alcalde a Alcalde. La cercanía también tiene su lógica y variable en nuestro ejercicio. Tenemos audiencias públicas todas las mañanas. Yo llego a las 8:30 de la mañana todos los días y me voy a las 21:00 horas a la casa, porque en las tardes hago trabajo en terreno".
Otra de las diferencias que remarca Calderón respecto a su antecesor en el cargo dice relación con la gestión en el Municipio de Quillota, el cual quedó sumamente endeudado durante la gestión Mella. Y es que el porcentaje de la deuda, en relación al gasto ejecutado durante el 2023, permitió disminuirla hasta un 0% en dicho concepto, todo esto debido a las acciones emprendidas por la administración actual.
Ante la consulta de por qué la gestión Mella estaba endeudada y la de él no, Calderón explció que "todo lo que he hecho como Alcalde siempre fue presentado como asesoría a quien era mi jefe. Yo estoy haciendo lo que en ese momento asesoré, donde muchas cosas se me hicieron caso y otras no. El manejo de las cuentas municipales y el presupuestario fue advertido por la Dirección de Finanzas y por este Administrador. La tónica y propuesta para enfrentarlo se manejó de la misma manera".
Junto a afirmar que siempre era Mella quien tenía la última palabra –en su condición de Alcalde por entonces– la actual autoridad criticó la mirada de endeudamiento que tiene el ex jefe comunal en materia municipal: "Ese es un error garrafal y absoluto. Al tener deuda no se endeuda sólo el Municipio, sino que a alguien no le estás pagando, y generalmente son los proveedores. Tú estás empobreciendo con una deuda municipal a un proveedor de servicio o de algún bien que le estás entregando a la comuna. Le generas daño a un tercero y eso ocurrió. Cuando administras recursos propios, tú te estás endeudando y tú puedes pagarlo con algún bien que está a tu nombre. Pero cuando administras plata pública de un Municipio el endeudamiento corresponde a un efecto negativo a alguien que te prestó un servicio".
Finalmente, y ante la consulta de si la deuda en cero es su gran legado, Calderón sostuvo a Puranoticia TV que "creo que ese es uno de los grandes logros que hemos tenido, pero no es el principal ejercicio que hemos querido hacer. Forma parte de una gestión integral: tuvimos Concejo donde hablamos sobre gestión municipal hacia las comunidades a través de subvenciones en presupuestos participativos, subvenciones a la comunidad trabajadas con los concejales, más de $150 millones. Esto, gracias a que no tenemos deuda. Instalamos semáforos donde la comunidad por años lo pedía. Esto, con recursos municipales. O sea el recurso municipal con este concepto de manejo eficiente y responsable de las finanzas, permite también llegar a otros puntos que son los más importantes, como tener por ejemplo un contrato de áreas verdes afín a las áreas verdes que tenemos, pero también triplicar las ayudas sociales los últimos tres años".
Palabras más, palabras menos –y como ya se dijo– será finalmente la ciudadanía la que remarque las diferencias entre Óscar Calderón y Luis Mella, quienes se enfrentarán en las urnas el fin de semana del 26 y 27 de octubre, instancia eleccionaria donde tendrán un tercero en competencia: Gustavo Bertelsen, representante del Partido Republicano que también entró a la competencia para quedarse con la Alcaldía de Quillota.
PURANOTICIA