La carta de la UDI al Consejo Constitucional en la región de Valparaíso reconoció que ha sentido "apatía" y "distancia" de la gente frente a este nuevo proceso constitucional, pero también afirma que el sentimiento cambia a medida que logra explicarles su importancia.
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Fue su experiencia en el mundo público y privado, además de su conocimiento de las leyes, lo que puso a Edmundo Eluchans Urenda en la órbita inmediata de la Unión Demócrata Independiente (UDI) para asumir una candidatura de cara a la elección del próximo domingo 7 de mayo donde los chilenos deberán elegir a quienes conformarán el Consejo Constitucional, con miras a la redacción de una nueva Carta Magna.
No por nada fue proclamado por la unanimidad de los miembros del Consejo Regional de la UDI en Valparaíso a mediados de enero, para que los representara de cara a este segundo proceso constitucional, luego de lo que fue el rotundo fracaso de la Convención Constitucional y el posterior triunfo del «Rechazo» con más del 60% de los votos.
Es justamente este factor uno de los temas centrales de la última conversación que Puranoticia.cl sostuvo con la carta gremialista, quien reconoce que ve cierta "apatía" y "distancia" de la gente frente a este nuevo proceso; situación que ha debido revertir utilizando sus dotes tanto políticos como académicos, pues afirma que conversando, resolviendo dudas y explicando, ha podido generar algo de optimismo entre las personas que lisa y llanamente están desencantadas.
De igual forma, quien fuera Diputado de la República entre 2006 y 2014, siendo incluso Presidente de la Cámara entre 2013 y 2014, coincide en que la seguridad es tema central, motivo por el que expone sus ideas para abordar este tema, centrado principalmente en el respeto: "Debe respetarse la ley, debe respetarse a las personas y debe respetarse a la autoridad", señala el candidato UDI a quedarse con uno de los cinco escaños al Consejo Constitucional en la región de Valparaíso.
¿Cómo va este camino a la elección del próximo domingo 7 de mayo?
Bien, yo estoy muy optimista, muy contento, trabajando con mucho entusiasmo. Tengo una muy buena recepción de parte de la gente. Esa primera distancia y apatía que uno ve, de repente cuando uno empieza a conversar y tratar el tema más a fondo, la gente se interesa más, pregunta y finalmente creo que... bueno, siempre hay excepciones, pero creo que la gente queda mucho más motivada.
¿Qué ha podido recopilar y sacar en limpio del trabajo en terreno que ha tenido durante estas últimas semanas?
Primero, cierta apatía y distancia, salvo que esto sea una reunión previamente concertada, porque ahí hay adeptos, personas que tienen alguna cercanía con uno. Pero si uno llega a lugares donde no hay mayores antecedentes, ni del proceso ni de mí como persona, esa apatía o distancia inicial yo creo que se va disminuyendo a medida que vamos conversando, se va explicando el alcance del proceso, cuál es la necesidad de que participemos en esto y yo tengo una buena recepción en este sentido.
¿Ha podido conversar con otros candidatos respecto a este tema? ¿Le han comentado que les pasa lo mismo de sentir apatía y distancia de parte de la gente?
No, la verdad es que no he estado con otros candidatos, salvo en debates. No hemos tenido oportunidad de conversar muy a fondo este asunto. Me ha tocado debatir con muchos candidatos, pero estamos en una actividad donde sale directamente al aire o el público ya nos está oyendo y debemos concentrarnos en lo que estamos, así que no he tenido ocasión de compartir mayormente estas percepciones, estas impresiones que uno va formándose a medida que transcurren los días.
Justamente el tema del interés ciudadano era uno de los aspectos que queríamos abordar con usted. Sabiendo que hay cierta distancia de la gente, ¿cómo cree usted que se puede llegar a los "desencantados" del primer proceso?
A los desencantados del primer proceso, lo que hay que hacer es explicarles por qué estamos en este segundo proceso constitucional y cuál es la necesidad imperiosa que de este proceso salgamos bien, y que este segundo proceso concluya exitosamente. Primero, con una buena elección; después, con un buen trabajo en la Convención; que ofrezca una buena Constitución; y que sea aprobada por una altísima mayoría de los chilenos, para que finalmente encontremos un texto constitucional que pueda ser capaz de unirnos a todos y que tenga la máxima legitimidad.
Pero en la suma y resta de apáticos vs interesados, ¿usted siente que hay motivación por participar de este nuevo proceso constitucional?
Siempre hay un núcleo de personas que se interesa por este tipo de cuestiones, que es más cercana al mundo político, que hay gente que está muy informada; pero esa gente que está muy informada y motivada por el proceso, claro que es minoritaria, aunque no me gusta hablar de porcentaje. También hay gente distante, que aún cuando estemos conversando media hora, van a seguir distantes. Pero sí observo que la gran mayoría de los distantes, cuando uno conversa, les explica y les disipa dudas, quedan motivados. Esto me hace pensar que luego del trabajo que estamos haciendo los candidatos, va cambiando la percepción de la gente.
Sin dudas que la seguridad es el tema central de las preocupaciones de los chilenos. Teniendo esto como premisa, ¿qué puede hacer usted desde el Consejo Constitucional para atender este tema?
Las constituciones dicen muchas cosas a través de lo que está escrito, pero también las constituciones dicen a través de un sello que se le impregna y a veces no son necesarias muchas palabras. Mi mirada es que creo que debe quedar claro que desde la primera letra, desde el primer artículo hasta el último de la Constitución, debe quedar claro que Chile es una democracia, un Estado de derecho, y eso significa respetar la ley, respetar los derechos de las personas, respetar a las personas que cumplen funciones públicas, así como los funcionarios públicos deben respetar a los ciudadanos. Mucho se habla del Estado subsidiario, y no tiene nada que ver con lo que estamos conversando, pero sí la idea que hay cuestiones que trascienden en las constituciones, más allá de lo que esté escrito o no esté escrito. El principio de subsidiariedad claro que está plasmado en toda nuestra actual Constitución, pero la palabra subsidiariedad en ninguna parte está escrita. Entonces, pienso yo que esta Constitución tiene que plasmar de alguna forma, categórica y que a nadie le quepa duda, que Chile es un Estado de derecho, que debe respetarse la ley, que debe respetarse a las personas y que debe respetarse a la autoridad, a Carabineros, que debemos someternos a la ley y que somos todos iguales. Y la forma de ser iguales es respetarnos, y eso espero que quede inequívocamente expresado en nuestro texto constitucional. Eso nos va a ayudar, creo yo, a salir de todas las situaciones tan malas, dolorosas e inconvenientes que estamos viviendo hoy en Chile.
¿Qué le ha parecido hasta el momento el trabajo del Comité de Expertos que, por ejemplo, decidió no incluir un capítulo especial para las Fuerzas Armadas y de Orden?
Mi opinión respecto de eso es que cuando los que se negaron a incluir un capítulo especial para las Fuerzas Armadas, dicen que eso es lo que obedece a nuestra tradición constitucional, ya que la primera Constitución que estableció un capítulo especial para las Fuerzas Armadas y de Orden y Seguridad, es la de 1980, que es la que hoy nos rige. Pero esa justificación a mí me parece un pretexto. Yo creo que aquí hay un sesgo, de distancia con las Fuerzas Armadas y las de Orden y Seguridad, porque hay muchas otras instituciones y autoridades que contemplan hoy nuestra actual Constitución, que tienen un capítulo especial, y que en las constituciones anteriores no tenían, como la Contraloría General de la República, el Servicio Electoral, el Banco Central, etcétera. Y no mencionan al Ministerio Público porque se creó después de la Constitución de 1980. Pero yo creo que ese es un tema que no está zanjado, que se va a discutir y me parece que más importante que el que exista o no un capítulo –que yo creo que debe existir y lucharé para que exista–, pero independiente que exista o no, lo importante es el contenido, y ahí lo único que me interesa precisar es que una de las bases dice que hay un especial reconocimiento a las Fuerzas Armadas y de Orden y Seguridad, con especial mención a Carabineros y la Policía de Investigaciones «subordinadas al poder civil». Yo creo que esa es una frase desafortunada, porque el poder civil es una cuestión no definida, equívoca, y yo creo que lo que debe decir la norma constitucional es que las Fuerzas Armadas y de Orden y Seguridad deben estar subordinadas a la Constitución y a la ley, como lo están todas las autoridades que establece nuestra Constitución. En consecuencia, me importa más eso que lo del capítulo. Pero insisto en que lo justo y razonable es que haya un capítulo, y lucharé para eso.
Si bien, el "adversario" debería estar en las listas Todo por Chile y Unidad para Chile, lo cierto es que los votos los pelearán palmo a palmo con Republicanos. ¿Cómo ve esta competición con quienes son más afines ideológicamente a su propia lista de Chile Seguro?
Pertenecemos a una lista distinta. Podemos tener algunas afinidades en algunas cuestiones, por cierto, pero ellos han querido marcar una diferencia y decidieron no ir con nosotros. Está bien, están en su derecho, pero eso tendrá un costo importante porque ellos van a perder votos y nosotros vamos a perder votos. Pero yo miro el futuro con más optimismo, yo creo que nuestro discurso se está entendiendo, se está aceptando la conveniencia y necesidad que de este proceso salgamos y salgamos bien, salgamos por la puerta ancha. Chile tiene un compromiso y tenemos que cumplirlo.
Considerando que la región de Valparaíso posee los dos puertos más importantes del país, además del puerto terrestre en Los Andes, ¿cómo se puede potenciar a este rubro desde el Consejo Constitucional?
Yo creo, en primer lugar, y esto no es directo a la pregunta, pero está en el entorno, que lo primero que debemos hacer en la Constitución es conocer y reconocer el maritorio, que es el territorio marítimo. Y nuestros puertos son un elemento fundamental y creo que son la puerta más antigua de acceso a nuestro país, de manera que hay que darles la máxima importancia y realce.
Para finalizar, ¿cuál es el mensaje que le gustaría entregar a los votantes de la región de Valparaíso?
Estamos en una disyuntiva que es sumamente importante para Chile. Después del malísimo proceso que vivimos en el anterior proceso, yo creo que es necesario que este trabajo se haga bien. Hay que hacer un trabajo serio. En este proceso debe haber gente que entienda en toda su magnitud la importancia de la tarea que hay por delante y yo pongo a disposición de ese esfuerzo, de ese trabajo, de ese desafío, mi experiencia que creo que es importante y valiosa para esta labor. Además, mi permanente disposición al diálogo. Yo tengo ideas, las defiendo, pero soy un hombre dispuesto a conversar y mi historia política así lo demuestra.
PURANOTICIA
