Consejero regional Manuel Millones recordó que la sanitaria Essbio construirá una planta en Pichilemu para desalinizar el agua de mar para sus clientes en O'Higgins, Maule y Biobío; instando a Esval a seguir el mismo camino para hacerle frente a la crisis hídrica.
Luego que el Gobierno confirmara que la construcción de plantas desalinizadoras "pueden ser una opción" para paliar la grave escasez hídrica que vive el país, con la región de Valparaíso como una de las más golpeadas, Puranoticia.cl quiso conocer la mirada que tiene actualmente el Consejo Regional (Core) para financiar iniciativas de estas características en zonas costeras del territorio.
En ese sentido, se están llevando a cabo dos cursos de acción: el primero de ellos, por medio de la Comisión de Recursos Hídricos, cuyos consejeros miembros están haciendo un recorrido por las comunas costeras para ver dónde puede ser factible instalar una planta desalinizadora, pero de menor tamaño, para localidades pequeñas.
La segunda vía apunta a un estudio, el cual determine una serie de parámetros, como por ejemplo cuál es el mejor punto de descarga del ducto y las zonas donde hay mayores corrientes; esto, con el objetivo de evitar un impacto medioambiental producto de la salmuera (concentración de sal extraída que, en caso de ser vertida al mar, puede ocasionar daños en las especies marinas).
Si bien, el país cuenta con cerca de 70 plantas desalinizadoras, lo cierto es que la gran mayoría son muy pequeñas y para poblados reducidos. No es el caso de la construida en Caldera, cuya inversión bordeó los 250 millones de dólares. Tomando como ejemplo esta planta a gran escala, desde el Consejo Regional cuentan a Puranoticia.cl que es prácticamente imposible financiarla con recursos propios.
La de la región de Atacama es la planta desalinizadora más moderna que se ha construido en Chile para consumo humano y permite garantizar el suministro de agua potable para más de 220 mil personas de Chañaral, Copiapó, Tierra Amarilla y la propia Caldera. En la zona, el agua de mar es desalinizada e impulsada a través de 39 kilómetros de tubería a los puntos de abastecimiento.
En el caso de la región de Valparaíso, son dos las vías de financiamiento que se pueden utilizar: con recursos públicos, ya sea del Consejo Regional o la Subsecretaría de Desarrollo Regional (Subdere), destinados a plantas de bajo costo e instaladas en caletas o poblados costeros pequeños, tal como ocurre con una a menor escala que se ubica en la comuna de La Ligua, provincia de Petorca.
El segundo camino es por medio de inversión de privados donde, a su vez, existen otras dos vías: que una empresa haga la inversión y luego se encarguen de vender el agua desalinizada y apta para el consumo humano o; que la compañía sanitaria a cargo de la concesión del recurso hídrico –Esval en el caso de la región de Valparaíso– asuma el costo de la inversión y luego la entregue a la población.
Un ejemplo de inversión de privados es el de la empresa Aguas Pacífico, que materializó en Quintero un proyecto consistente en la construcción y operación de una planta desalinizadora que produce y transporta hasta 1.000 litros por segundo (l/s) de agua dulce, de mar a cordillera, para clientes industriales, mineros, agrícolas y sanitarios (los últimos, para consumo humano).
Es gracias a este proceso que, luego de un acuerdo, la empresa le está entregando agua potable a vecinos del sector Quebrada Alvarado, ubicado en la comuna de Olmué, cuyo precio por metro cúbico asciende a $1.000.
El segundo ejemplo, y que da cuenta de una inversión por parte de una empresa sanitaria, es el de Essbio, cuya área de concesión va desde la región de O'Higgins hasta la del Biobío, pasando por El Maule.
Y es que esta firma anunció la construcción de una planta desalinizadora en la comuna de Pichilemu, la cual utilizará una tecnología de osmosis inversa, con una capacidad de 20 litros por segundo. Su entrada en operación está prevista para el segundo semestre del 2023 y su inversión es de $2.200 millones
Con todos estos antecedentes, Puranoticia.cl conversó con el core Manuel Millones, quien comenzó a analizar el tema señalando que "aquí lo que ha faltado es voluntad política de los gobiernos y no sé por qué razón, no logro sospechar las razones de no tener la voluntad de avanzar en las plantas desalinizadoras o en el tratamiento de aguas grises".
Y luego apuntó a la empresa sanitaria local, indicando que "el punto es por qué Esval, que es una empresa que tiene un monopolio, no ha hecho una inversión para cumplir con lo que la concesión le mandata, que es entregar agua".
Respecto a lo que ocurre con Essbio, dijo que "ellos sí anunciaron la construcción de una planta desalinizadora. Entonces hago la comparación de por qué en la octava región sí y aquí en la quinta región no, si la sanitaria perfectamente puede hacer la inversión para otorgar agua a los habitantes".
Millones reiteró que "acá falta una voluntad política y reglas claras para que un privado invierta; o que Esval haga el mismo ejercicio que está haciendo Essbio en la región del Biobío y hagan la inversión, pero alguien tiene que hacerlo. Yo prefiero que lo haga el privado, porque el Estado es más lento y además entra la burocracia del sistema público".
Luego de ser emplazados por el core Millones, Puranoticia.cl tomó contacto con la empresa sanitaria a cargo de la distribución del agua potable en la región de Valparaíso para conocer su postura en torno a la implementación de plantas desalinizadoras.
Esval, a través de su gerente regional, Alejandro Salas, explicó que "creemos que el mejor camino para que la desalación sea una solución sostenible a nivel económico, social y medioambiental, es que estas plantas sean multipropósito y podamos contar con ellas como una fuente alternativa a nuestra producción".
Además, el ejecutivo de la compañía sanitaria subrayó que "hay varias empresas que desarrollan proyectos de este tipo en la región de Valparaíso, con las que mantenemos permanente contacto para poder recurrir a ellas en el futuro".
También sostuvo que "estamos a disposición del consejero (Millones) para aclarar sus dudas en torno a este tema".
Puranoticia.cl también conversó con el core Christian Macaya, representante de la provincia de Petorca y quien hasta hace algunas semanas era el vicepresidente de la Comisión de Recursos Hídricos del Consejo Regional de Valparaíso.
Junto a afirmar que es absolutamente posible materializar plantas desalinizadoras a mayor escala en la región de Valparaíso, la autoridad regional explicó que "se ha proyectado la construcción de dos plantas de osmosis en la región de Valparaíso" y adelantó que "espero que una pueda estar emplazada en la provincia de Petorca, porque somos la cuenca menos favorecida por las altas cordilleras".
Como ésta es una de las zonas más golpeadas por la sequía y la escasez hídrica, el representante de Petorca en el Core de Valparaíso afirmó que "estas dos plantas serían a mayor escala", a diferencia de la instalada en La Ligua, cuyo proyecto es "piloto y está destinado a entregar agua a grupos acotados" de habitantes.
Acerca de la proyección de una segunda planta, el core Manuel Millones sugirió la localidad de Laguna Verde, al sur de la comuna de Valparaíso: "Nosotros queremos ofrecer con la comunidad que el piloto se haga en esta localidad, porque tiene todas las ventajas: está cerca del mar, está la planta de AES Gener sin uso y tienes línea recta para llegar a (el embalse) Peñuelas".
La cercanía con el lago Peñuelas resulta fundamental para la autoridad regional, pues en este lugar se puede acopiar el agua desalinizada en la planta de Laguna Verde y, de esta manera, "se resolvería el problema en Laguna Verde y en el Gran Valparaíso", pues se puede realizar el traslado de agua hacia el embalse Los Aromos, que abastece con el recurso hídrico a más de un millón de personas en Valparaíso, Viña del Mar, Concón, Quilpué y Villa Alemana, incluyendo también al Litoral Norte.
PURANOTICIA