Rodrigo Mundaca analizó la situación que viven los vecinos del sector de Costa de Montemar, señalando en entrevista televisiva que "si hay que demoler para colocar en la centralidad la protección de la vida de las personas; hay que demoler".
Un total de cuatro edificios del sector de Costa de Montemar, en el límite entre Reñaca y Concón, han debido ser evacuados de manera preventiva a raíz de los dos grandes socavones registrados en el campo dunar, a sólo metros de estas viviendas.
Las intensas precipitaciones, con 42 milímetros de agua caída sólo durante la madrugada del lunes 11 de septiembre; sumado al suelo ya erosionado; hizo que las obras de mitigación tras la primera emergencia de agosto colapsaran, provocando un segundo socavón de gran tamaño en este lugar de la región de Valparaíso.
En agosto fue evacuado el edificio Kandinsky, al que se sumaron este lunes las torres Miramar, Miramar Reñaca y Santorini Norte, todos parte del mismo conjunto habitacional ubicado en el límite entre las comunas de Viña del Mar y Concón.
El tema fue abordado este martes por el gobernador regional de Valparaíso, Rodrigo Mundaca, quien en conversación con el matinal de Canal 13, «Tu día», manifestó que lisa y llanamente "hay que demoler" estas estructuras para proteger a las personas.
"Esa es una decisión que tiene que tomar la autoridad comunal, pero si usted me pregunta a mí si hay que demoler para colocar en la centralidad la protección de la vida de las personas; hay que demoler", sostuvo la máxima autoridad regional.
Respecto a quién paga los costos de esto, Mundaca afirmó que "aquí hay seguros comprometidos y, por tanto, las inmobiliarias se tienen que hacer cargo. La inmobiliaria de Miramar A y B es Claro, Vicuña y Valenzuela, que está asociada al grupo inmobiliario Penta y, por tanto, van a tener que responder".
El Gobernador Regional de Valparaíso continuó su análisis indicando al matinal televisivo que "no hay que minimizar lo que está ocurriendo porque estamos hablando –en el caso particular de la Torre B Miramar– de primeras viviendas, de personas que destinaron gran parte de sus ahorros para vivir en este lugar, pero en un territorio que objetivamente nunca debió haber sido edificado".
Rodrigo Mundaca también dio cuenta que a las 57 familias que fueron evacuadas de la torre Miramar les arrendaron departamentos provisorios hasta que "pudieran regresar". Al respecto señaló que eso "está bastante difícil", ya que hay primero hay que reconducir las aguas del colector, hacer un trabajo de ingeniería y dar certezas.
"Imagínate que las familias vuelvan y tengamos una precipitación similar a la anterior, donde caen 42 milímetros en una noche y nuevamente se profundiza la erosión y la fragilidad del sistema; estaríamos lamentando pérdidas de vidas y eso no puede ocurrir", complementó el jefe regional.
Por último, el gobernador Mundaca concluyó diciendo que "tenemos que ser súper drásticos y súper sinceros: la centralidad está puesta en proteger la vida de las personas, y si eso significa que hay que demoler y construir viviendas donde se puedan edificar, es lo que hay que hacer".
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