El terreno pertenece a la familia Easton, la cual se agrupa en la razón social de Easton Inmobiliaria, empresa que tenía destinado originalmente el espacio como una reserva forestal y con funciones de ganadería.
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Hace dos semanas, Puranoticia.cl daba cuenta de una toma de terrenos en el fundo Santa Rosa de Colmo, ubicado en el límite de las comunas de Concón y Quillota, la cual ha sido convertida por las familias en un verdadero condominio, pues en su interior han construido rejas, portones, han pavimentado e incluso instalado iluminación.
Se trata de 120 familias, las cuales se tomaron a la fuerza un espacio equivalente a 20 hectáreas, los que las lotearon para finalmente ocupar de manera ilegal.
El terreno pertenece a la familia Easton, la cual se agrupa en la razón social de Easton Inmobiliaria, empresa que tenía destinado originalmente el espacio como una reserva forestal y con funciones de ganadería.
No obstante ahora, al verse de brazos cruzados, decidieron llevar el tema a la Corte de Apelaciones de Valparaíso, con una acción emprendida contra Claudia Contreras Astudillo, a quienes apuntan como la líder de la toma, quien incluso vendía paños del predio usurpado en $3 millones.
La mujer, en tanto, respondió al recurso indicando que "lo narrado por la recurrente adolece de veracidad, pues indican que yo estaría a cargo de ofrecer lotes y que me habrían entrevistado en un lugar en el que nunca he vivido".
De igual forma, asegura que los ocupantes del predio no han destruido nada y que han realizado sus construcciones adecuadamente, sin afectar al medio ambiente.
Luego, la inmobiliaria de los propietarios presentó un "téngase presente" ante el tribunal de alzada porteño, identificando a Eduardo Domínguez –hijo de Claudia Contreras– como el líder de la toma: "El señor Domínguez Contreras admite expresamente ser vocero organizador, líder e intérprete del deseo de los restantes usurpadores", sostiene el recurso.
Frente a esto, el empresario Claudio Easton, vocero de la familia dueña del fundo Santa Rosa de Colmo, señaló a El Mercurio que "esto ocurre en otros países, pero nadie imaginó que que iba a llegar a Chile con una violencia inusitada. La autoridad no se atreve, porque no tiene el respaldo político para ejercer el democrático poder y deber que tiene de actuar".
PURANOTICIA
