La víctima de los hechos era su hija de 12 años, quien falleció presuntamente asesinada por la mujer.
La Corte de Apelaciones de La Serena mantuvo sujeta a la medida cautelar de prisión preventiva a M.L.A.P., acusada por el Ministerio Público como autora de los delitos consumados de parricidio e incendio, y como cómplice de los delitos de abuso sexual y violación de su hija menor de edad, ilícitos perpetrados presuntamente el año 2020 en la villa Talinay, en la comuna de Coquimbo.
En fallo unánime, la Primera Sala del tribunal de alzada, integrada por los ministros Vicente Hormazábal, Iván Corona Albornoz y la abogada (i) Carolina Salas, desestimó el recurso de apelación interpuesto por la defensa y confirmó la resolución recurrida, dictada el pasado 17 de febrero por el Juzgado de Garantía de Coquimbo, por considerar que la libertad de M.L.A.P., constituye un peligro para la seguridad de la sociedad.
“Atendido el mérito de los antecedentes, lo expuesto por los intervinientes en la audiencia, compartiendo estos sentenciadores los argumentos expuestos por el tribunal a quo, estimando que no existe una variación de circunstancias que amerite una modificación de la medida cautelar decretada en autos, y de conformidad a lo dispuesto en los artículos 149, 358 y 370 del citado cuerpo legal, se confirma la resolución apelada de fecha diecisiete de febrero de dos mil veintitrés, por el Juzgado de Garantía de Coquimbo, íntegramente transcrita en la carpeta digital”, sostiene el fallo.
Según el ente persecutor, en el transcurso de 2014, el coacusado L.A.S.E., al interior de un domicilio ubicado en el sector alto de la comuna de Coquimbo, abusó sexualmente de la hija de su pareja M.L.A.P., quien denunció la situación, sin embargo posteriormente hizo que la niña se retractara.
En septiembre de 2020, la pareja decidió vivir juntos, con la víctima y un hijo en común, a un domicilio ubicado en la villa Talinay, comuna de Coquimbo, inmueble donde L.A.S.E. volvió a abusar y violar a la niña en forma reiterada, de modo que M.L.A.P. cooperó con su conviviente en la ejecución de los hechos permitiendo que tuviera acceso a la víctima a sabiendas de la denuncia por abuso sexual realizada en 2014.
En tanto, el 26 de noviembre de 2020, al interior de la vivienda, M.L.A.P., portando un cuchillo se dirigió hasta el dormitorio de la víctima, su hija de 12 años de edad, ubicado en el segundo piso de la vivienda. La menor se encontraba sobre la litera superior del camarote de su habitación, instantes en que la imputada la atacó con el arma blanca, propinándole heridas que le provocaron una hemorragia que le causó la muerte de forma no inmediata, lesiones que no eran necesariamente mortales de haber recibido socorro oportuno.
Tras atacar a su hija, la imputada prendió fuego al colchón ubicado en la litera inferior del camarote, causando un incendio que consumió parte del mobiliario de la habitación.
PURANOTICIA