Esto se debe principalmente a que el club Oro y Cielo es administrado por la empresa mexicana Grupo Pachuca, razón por la que no ven con buenos ojos que se le entregue gratis estas instalaciones municipales a una firma privada.
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Continúa el revuelo generado por una publicación de Puranoticia.cl, que daba cuenta de que Everton de Viña del Mar es el único club profesional de la región de Valparaíso que no paga ningún peso por utilizar el estadio municipal de la comuna en la que juega sus partidos de local, en este caso con el Sausalito.
Esto, debido a que el reducto deportivo ubicado en la avenida Padre Hurtado es entregado de manera gratuita por la casa edilicia, a raíz de un comodato firmado en marzo de este año por la administración de Virginia Reginato y aprobado por el Concejo Municipal de entonces, el que le facilita el coliseo sin ningún costo para el club.
Importante es traer a colación que Everton de Viña del Mar es administrado por la empresa mexicana Grupo Pachuca, la cual el año 2016 adquirió el 80% de las acciones del elenco chileno, mientras que el 2019 se hizo con el 20% restante, iniciando su periplo por nuestro país, el que completa con los clubes Pachuca y León, de México; y Atenas de San Carlos, de Uruguay.
En cuanto al comodato, hay que mencionar que éste es de uso gratuito y autoriza al club de la ciudad utilizar la cancha los días que tienen partidos como local y, además, una vez a la semana para que el primer equipo realice un entrenamiento. Cabe indicar que también el acuerdo estará vigente hasta que termine el actual Campeonato Nacional 2021.
Pues bien, considerando que la Municipalidad de Viña del Mar le entrega gratuitamente el estadio Sausalito a una empresa privada, Puranoticia.cl quiso conocer la opinión de los concejales para saber qué les parecía este hecho, y más aún considerando que ellos no tuvieron injerencia en la decisión adoptada, pues asumieron casi cuatro meses después de firmado el comodato.
El concejal Pablo González (PC) comentó al respecto que "una de las condiciones que debe haber es que como todo locatario, como todo vecino que paga el aseo, el Grupo Pachuca debe pagar los permisos por entradas, ventas, porque ellos lucran. Hoy ellos tienen el estadio sin costo, pero no se hacen cargo del pago de las deudas y cuando se les dice que tienen que pagar anteponen al equipo por delante, cuando ni siquiera han tenido una deferencia con la familia evertoniana. Hoy se acuerdan del hincha, que son un equipo histórico, porque es algo que les conviene para el bolsillo. Ellos, como toda persona y como toda empresa, deben pagar".
Por su parte, el concejal Alejandro Aguilera (CS) comentó al respecto que "creo que estos contratos, licitaciones, entregas que el Municipio hace al mundo privado, creo que debiesen revisarse en el sentido de que lo principal es entender que esto es patrimonio de la ciudad, vía administración municipal y creo que ese es el punto de partida. Lo que ocurre en el caso de Everton debe ser una discusión que se debe ampliar a la comunidad. El club es un patrimonio que fue patrimonio social y natural, y a mí me gustaría mucho volver a la actividad del fútbol como una cuestión social central de las ciudades. Así que creo que esta arista que se abre va a seguir trabajándose".
En tanto, el concejal Tomás de Rementería (PPD) sostuvo que "siempre lo cuestioné, pero de la misma forma que se perdió la sede del Everton –y podrán investigar cómo se perdió– porque el Everton le pertenecía a Viña. Hoy, es una empresa comercial que se la vendieron a los mexicanos, entonces es absurdo que el estadio esté en un comodato a título gratuito. Pero bueno, será parte de las cosas que doña Macarena (Ripamonti) tendrá que escuchar y cambiar. El Everton no sólo tiene el comodato, sino que además la Municipalidad le pasaba plata al Everton, entonces cuando dejó de ser patrimonio de la ciudad y pasó a ser una empresa privada, no había por qué hacerlo".
Una opinión diferente fue la que expresó el concejal René Lues (DC), quien expuso que "a mi juicio, más allá de la forma en que Everton dispuso de este contrato con la anterior administración, en lo personal, lo que me importa es que Everton siga en el estadio, que sea su estadio. Este es un estadio donde sólo juega un club, este estadio no está asociado a ningún otro club, entonces que siga jugando, pero además, me gustaría que Sausalito se abriera por ejemplo al deporte amateur, también me gustaría que se prestara a la gran y hermosa actividad de encuentro de las bandas de guerra, que era un espectáculo extraordinario que reunía a miles de personas y además era hermoso".
Similar opinión fue la que entregó el concejal Carlos Williams (RN), quien sostuvo que este comodato con el club Oro y Cielo se materializa "porque Everton es el equipo que representa a la ciudad de Viña del Mar y yo creo que hay que darle las facilidades a una institución que nos representa a nivel nacional e internacional".
Finalmente, el concejal Sandro Puebla (IND-PS) planteó que "siempre he sido de la idea que Everton debe tener un trato diferenciado en la utilización del estadio, ya que es el club de la ciudad. Lo que sí, siempre he sido de la idea –y así se lo señalé a la administración anterior– que a cambio de darle facilidades en la utilización del estadio, el club debía comprometerse a vincularse más con la ciudad, haciendo clínicas deportivas u otras actividades en los barrios, que fomenten el deporte, sobre todo en los niños. Por eso creo que claramente que una vez que haya que renovarlo, espero que la actual Alcaldesa acoja mis planteamientos y, a cambio del comodato, pueda hacerse mayores exigencias o contraprestaciones al club".
Vale hacer presente que Puranoticia.cl intentó conocer la opinión de las dos concejalas que tiene la comuna –Nancy Díaz (IND-FA) y Antonia Scarella (UDI)– sin embargo ninguna de ellas respondió al llamado de este medio.
PURANOTICIA
