Concejal Pablo González planteó que si la empresa que controla al elenco "Oro y Cielo" no paga la deuda, no se le renovará el contrato para usar el Sausalito, arriesgando así su localía para la Temporada 2022.
Si bien, desde hace años que se viene hablando de que Everton le debe dinero a la Municipalidad de Viña del Mar, lo concreto es que mucho no se sabía respecto al monto exacto de la deuda ni tampoco el concepto de la misma.
Con el objetivo de aclarar estos dos puntos, el concejal Pablo González Vega (PC) solicitó un informe a la Dirección de Ingresos, estableciéndose –según el documento, al cual Puranoticia.cl tuvo acceso– que la deuda de los mexicanos del Grupo Pachuca es de $81 millones ($81.359.190) y que ésta era por permisos de publicidad, de convenio y puntos de venta.
El problema es que la empresa que controla al club de fútbol viñamarino no reconoce la totalidad de la misma, pues afirman que ésta sólo asciende a $41 millones, debido a que aseguran que el resto de la deuda –arrastrada desde el año 2013– se encuentra prescrita.
"Ellos desconocen la mitad porque dicen que una deuda está prescrita, en consideración que no se puede determinar la prescripción de una deuda porque eso lo hace tribunales. Ellos alegan eso, pero no se ha hecho un proceso judicial", explicó el edil González, en conversación con Puranoticia.cl.
Además, desde el Grupo Pachuca indican que sería ilegal el cobro por concepto de permisos de publicidad; esto, de acuerdo a la Ley de Rentas, cuestión que tampoco se ha zanjado legalmente.
En detalle, en el ítem de «Publicidad», desde el elenco deportivo desconocen esta deuda indicando que no se cumple con lo que señala la Ley de Rentas Municipales, pues explican que la publicidad y propaganda "no es vista ni oída desde la vía pública". En cuanto a «Convenio» manifiestan los mexicanos que dicha deuda está prescrita, aunque en la mencionada ley se establece que "no es posible rebajarlas del sistema" y que incluso "mes a mes genera intereses". En tanto, «Puntos de Venta» es el único ítem que reconocen como deuda con la Municipalidad de Viña del Mar.
Justamente en la búsqueda de soluciones a esta controversia, se solicitó un pronunciamiento formal por parte de la Dirección de Asesoría Jurídica de la Municipalidad de Viña del Mar. Esto, con el objetivo de saber qué acciones debe seguir la casa edilicia para hacer efectivo el cobro del dinero y determinar la legalidad respecto a lo que expone Everton.
Junto a explicar que la denuncia "no es contra Everton", sino que contra el Grupo Pachuca, el concejal Pablo González propuso que "si Everton no paga, cumplir el contrato de comodato por uso del estadio y que el Municipio no se lo renueve más. Entonces, como requisito, si quieren usar nuevamente el estadio, entonces que se pongan al día con la deuda. Cada vecino de la comuna está obligado a pagar el aseo y las contribuciones, y si no las paga tiene una sanción; pero Everton desde el 2013 ocupa el estadio, sin arriendo, porque es parte de un convenio, pero no se han puesto al día con el pago".
A modo de dato, vale indicar que el arriendo del estadio por cada partido asciende a $8 millones, lo que se traduce en un ahorro de $128.000.000 por año para los mexicanos que controlan al club viñamarino, considerando los 16 encuentros que se disputan como local en el Sausalito.
Los próximos pasos que vienen en torno a esta controversia es saber si la prescripción que alude Everton es correcta; conocer si procede la ilegalidad de la que habla el Grupo Pachuca; y finalmente, saber cómo se va a producir el cobro de los $41 millones que sí reconocen como deuda con el Municipio de la Ciudad Jardín.
El concejal González cerró diciendo que "hay un dolo respecto a no querer pagar, pero sí renovar el contrato de uso del estadio. Una vez que se pronuncie Asesoría Jurídica, ahí determinar qué acciones tomará el Municipio, porque esta es una tarea del Municipio, de salir a reforzar lo que unidades como Ingreso han pretendido hacer y que el Grupo Pachuca no ha querido. Este es el mejor reflejo de cómo un privado se siente a sus anchas a hacer lo que quiera, evocando al romanticismo y lo que significa la marca Everton. Este es el minuto preciso para que el Grupo Pachuca se ponga al día con lo que debe".
PURANOTICIA