Se considerarán equipos de última tecnología, como son la cromatografía de gases y equipos electroquímicos para medición de compuestos orgánicos volátiles (COV’s), ácido sulfhídrico, y gases óxidos de nitrógeno (NOx), entre otros.
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Con el propósito de establecer una mayor certeza en la medición de los equipos electroquímicos sobre la situación del aire, autoridades regionales anunciaron un proyecto que permitirá la adquisición de instrumental para la detección y medición de gases en la región de Valparaíso, en particular para las comunas de Quintero y Puchuncaví.
De esta forma, se indicó que se considerarán equipos de última tecnología, como son la cromatografía de gases y equipos electroquímicos para medición de compuestos orgánicos volátiles (COV’s), ácido sulfhídrico, y gases óxidos de nitrógeno (NOx), entre otros.
El proyecto dará pie a la instalación de estos sensores en diversos puntos de la zona de Quintero y Puchuncaví, como son establecimientos educacionales, servicios de emergencias, ciudadanía, como también en la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA) y Laboratorio Ambiental de la Universidad de Playa Ancha (HUB).
El gobernador regional Rodrigo Mundaca enfatizó que la idea es “instalar sensores electroquímicos y cromatografía de gases complejos para poder determinar componentes orgánicos volátiles que hoy día no son medidos, particularmente en 18 establecimientos educacionales tanto de Quintero y Puchuncaví, pero extensivo a servicios de emergencia y también a la ciudadanía”.
Es importante recordar que, durante la última década, y en distintos establecimientos educacionales de las comunas de Quintero y Puchuncaví, han ocurrido situaciones de intoxicaciones que han afectado a niñas, niños y comunidad educativa de la zona, atribuyéndose como una de las causas la emisión industrial de gases.
El seremi de Medio Ambiente, Hernán Ramírez, sostuvo que el proyecto, que se encuentra en proceso de elaboración, permitirá “dar una mejor respuesta a este tipo de intoxicaciones que –lamentablemente- llevan ya varios años ocurriendo en la zona y las administraciones anteriores no han logrado poder poner mecanismos al servicio de la comunidad para evitar que sigan ocurriendo”.
Finalmente, Claudio Sáez, director del laboratorio HUB Ambiental de la Universidad de Playa Ancha, resaltó que “del punto de vista metodológico, con sensores electroquímicos estacionarios y móviles; y también respaldados y complementados por cromatografía gaseosa de alta resolución, nos va a permitir no solamente identificar peak, sino también -por ejemplo- identificar compuestos específicos y eventualmente algunas responsabilidades (…) Lo que buscamos a través del complemento de todas estas tecnologías es, primero, identificar señales de alarma que después permita -con otros equipo de alta resolución-identificar compuestos específicos que nos puedan dar luces de porqué se están presentando estos eventos de intoxicación”.
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