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Puranoticia.cl reveló hace unos días que Víctor Luciano Quintana, no siendo víctima del siniestro que afectó a Viña del Mar, Quilpué y Villa Alemana, se sumó a la huelga de hambre y actuó como vocero de las reales víctimas, lo que es una situación que incomoda a varios. Hoy, ese malestar los llevó a pedir su exclusión de toda reunión relacionada con el megaincendio.
Un total de 11 días en huelga de hambre resistieron algunos damnificados del megaincendio del 2 y 3 de febrero, quienes adoptaron la drástica medida como forma de llamar la atención de las autoridades y conseguir ayudas más rápidas y para todos. Sin embargo, a medida que pasaban las horas, poco a poco sus cuerpos fueron evidenciando fatiga, mareos, náuseas y aunque estaban al interior de una motorhome, que no es lo mismo que estar dentro de una carpa a todo sol sino bastante más agradable, finalmente depusieron la movilización.
Dicha drástica manifestación no estuvo libre de cuestionamientos, debido principalmente a que uno de sus líderes, no era realmente un damnificado. Puranoticia.cl reveló hace unos días que Víctor Luciano Quintana, no siendo víctima del siniestro que afectó a Viña del Mar, Quilpué y Villa Alemana, no viviendo nunca en ninguno de los lugares afectados, se sumó a la huelga y asumió un protagonismo y vocería de las reales víctimas que varios resintieron.
De hecho, Quintana se convirtió en presidente de una agrupación que actualmente lidera las noticias relacionadas a la catástrofe, la Asociación de Víctimas del Terrorismo del 2 y 3 de febrero, aunque realmente vive en el sur del país y es dueño de una empresa dedicada a la actividad de muebles de madera, cuyo giro es contratista en construcción de movimientos de tierra en Temuco.
Los mismos vecinos de Villa Independencia, lugar donde se realizaba la huelga de hambre, aseguraron no haberlo conocido. "No es vecino", dijeron, y el propio aludido, Luciano Quintana, confesó que es "voluntario" y que llegó al lugar "después de la tragedia".
La situación con Quintana ha sido incómoda desde que se supo la verdad y para muchos dicho malestar va en ascenso. A propósito de aquello, y con la huelga terminada, los damnificados enfrentan un nuevo problema.
De partida, tras conocerse el fin de la huelga de hambre, el delegado presidencial regional de Valparaíso, Yanino Riquelme, envió un comunicado de prensa en el que se mostró optimista frente al acuerdo alcanzado, valorando positivamente la constitución de mesas de diálogo con representantes y huelguistas tanto del sector de Villa Independencia en Viña del Mar como el sector de Pompeya en Quilpué. “Entendemos las complejidades que han sentido respecto del proceso que se ha ido llevando delante de reconstrucción y restitución de sus vidas tras la tremenda tragedia del 2 y 3 de febrero de 2024 y por lo tanto desde el Gobierno, desde todos sus frentes de trabajo nos hemos comprometido nuevamente a un trabajo en conjunto, a acelerar los procesos, a ponerle toda la fuerza para poder llevar adelante todo el conjunto de iniciativas que se necesitan para llegar a constituir una mejor calidad de vida para todas y todos”, enfatizó la autoridad regional.
Pero lo cierto es que todas estas conversaciones llevaron a un quiebre entre los damnificados y los huelguistas. El primer huelguista en ceder fue justamente Quintana, quien "después de una profunda reflexión y considerando la situación actual" decidió deponer la medida. Según consignó La Estrella, Quintana acusa a la Delegación Presidencial Regional de Valparaíso de dividir a los dirigentes. "He constatado que el Gobierno ha intentado dividir y negociar por separado con los dirigentes, lo que va en contra de nuestra lucha por la justicia y la igualdad", dijo.
Por su parte, el dirigente Jaime Mella, informó que la Delegación Presidencial Regional de Valparaíso acordó reunirse con las personas que se privaron de consumir alimentos, con la condición de que depusieran la huelga. "A las 11 de la mañana le contestamos a la DPR que la huelga continuaba, pero a las 17:00 horas nos reunimos nuevamente los huelguistas y lo pensamos mejor. Ante nuestros problemas de salud luego de diez días de huelga de hambre, no éramos las personas más idóneas para continuar, ya que tenemos enfermedades de base", explicó.
Pero el quiebre entre huelguistas y damnificados puede evidenciarse aún más con la postura opuesta que tiene Paola Pizarro, dirigente social de Viña del Mar, quien aseguró a Puranoticia.cl que “no hay avance, no hay nada. Sólo tenemos claro que tienen una reunión con el delegado presidencial regional (Yanino Riquelme) y va a participar Víctor Luciano Quintana, que no es damnificado y él no está autorizado por nosotros para que entre a ninguna reunión. Él no puede tomar decisiones por ninguna agrupación de nosotros, porque repito, no es damnificado, puede haber hecho un sacrificio, pero no queremos estar involucrados con ellos, con los dirigentes”.
La mujer puso énfasis en el hecho de los damnificados no están interesados en sacar réditos políticos, sino en que, efectivamente, el gobierno les entregue ayuda y cumpla con su palabra de no dejarlos solos. “Somos muchos los damnificados y las ONG y las Agrupaciones tampoco pueden tomar determinaciones por nosotros (se refiere a la Asociación de Víctimas del Terrorismo del 2 y 3 de febrero que preside, Víctor Luciano Quintana, y la ONG Sobrevivientes Megaincendio 2024 que lidera, Amanda Guerra, ex candidata a concejal). Lo que necesitamos es que las reuniones sean concertadas por nosotros, tenemos ya algunas, claras, con fechas y con ministros y todo. Las reuniones grandes las tenemos nosotros concertadas”.
Paola Pizarro insistió en que "puede asistir un solo dirigente de la ONG y quien no sea damnificado no entra más a ninguna reunión, porque aquí no queremos que hagan show. Ésa es la decisión que tomamos, porque nadie puede entrar tomando determinaciones por sí solo, somos todos dirigentes de diferentes sectores y tenemos que abarcar los territorios afectados, donde las problemáticas son distintas en cada comuna”.
La dirigente social sostuvo, además, que “no nos sentimos representados” ni por la Asociación de Víctimas del Terrorismo del 2 y 3 de febrero, ni la ONG Sobrevivientes Megaincendio 2024. “Ellos no representan a nadie. Hay 12 personas que están convocando a una reunión, de las cuales, 8 son de la ONG, ¿qué les pasa? No pueden hacer eso. Tendrían que darle un espacio a la ONG y espacio a todos. La huelga de hambre fue un fracaso porque la gente está decepcionada de quienes pertenecen a agrupaciones y a ONG”, añadió.
SIN ACUERDOS: HASTA AHORA
Hasta ahora, entre los damnificados del megaincendio y el gobierno no hay un acuerdo concreto que satisfaga realmente a las víctimas. El pasado sábado, hubo una fallida reunión entre los damnificados y la delegación presidencial regional, debido a que los que estaban en huelga de hambre, a través de un comunicado, señalaron que el encuentro “se vio frustrado por la falta de empatía por parte de funcionarios públicos”, y aseguraron que la delegación tampoco dio respuesta al petitorio de demandas.
Desde la vereda del gobierno, el delegado presidencial regional, Yanino Riquelme dijo entonces que “ha habido bastante intransigencia por parte de los representantes de este grupo de huelguistas”. En forma categórica, Riquelme descartó la entrega de un bono universal para todos los damnificados con los incendios del verano de 2024.
Tras 11 días en huelga, este jueves habría salido humo... pero aún no sabemos si es blanco, por la división entre los representantes de los damnificados, lo que se puede evidenciar con las disímiles posturas entre las víctimas que no quedaron conformes con el supuesto acuerdo alcanzado para bajar la huelga.
PURANOTICIA