Párroco de la capilla Nuestra Señora de la Esperanza, ubicada en Llolleo, indicó a los familiares del fallecido que no les permitió su ingreso porque no contaban con su autorización: "Es mi parroquia y no puedo permitir que pasen estas cosas", les indicó a través de un audio.
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El párroco de la capilla Nuestra Señora de la Esperanza se encuentra en el ojo del huracán, luego que una familia de Llolleo, localidad de San Antonio, acusara al sacerdote de negarles el velorio de una persona fallecida en dependencias de la iglesia.
Los familiares del fallecido denuncian que producto de los malos tratos del religioso, tuvieron que llevar a cabo la ceremonia en plena vía pública de la comuna.
Este vecino murió el viernes 18 de julio producto de un paro cardiaco, por lo que decidieron velarlo en la capilla más cercana al lugar donde vivió toda su vida.
Y a pesar de que los familiares contaban con el apoyo de una vecina que tenía las llaves de la capilla, el párroco de la misma lisa y llanamente les negó el ingreso.
"Hubo una descoordinación muy grande", explicó el sacerdote a través de un audio enviado a los familiares del vecino fallecido en San Antonio.
De igual forma, justificó su decisión señalando que la familia no contaba su autorización: "Es mi parroquia y no puedo permitir que pasen estas cosas", dijo.
"Aunque suene duro, somos nosotros, yo en este caso, el que pone las reglas", complementó el sacerdote en este audio enviado a los deudos.
Macarena Donoso, hija del fallecido, indicó a T13 que "no podemos entender a quien se hace llamar sacerdote (...). No buscamos ganarle a nadie ni disculpas públicas, porque el perdón no se obliga ni alivia, solamente cuando nace desde el alma y es genuino".
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