
La medida busca obtener pistas directas sobre la ubicación de los prófugos, basándose en la premisa de que han mantenido contacto con su círculo más cercano desde que huyeron.
La cinematográfica fuga de tres reclusos de la cárcel de Valparaíso ha activado un operativo policial de alta prioridad debido al peligroso prontuario de los criminales.
Entre los prófugos se encuentran Jairo Adonis González Miranda, condenado por el homicidio de la fotógrafa Albertina Martínez en 2019; y Juan Israel González Quezada, sentenciado por el homicidio del suboficial de Carabineros David Florido en 2022. El tercer reo, Claudio Fornes Vicuña, cumplía pena por tráfico de drogas.
La evasión, ocurrida cerca de las 2:30 de la madrugada del viernes 15 de agosto, fue detectada por un gendarme que vio a los internos deslizarse desde el techo del penal, a través de una tirolesa de acero. La cuerda estaba atada a un vehículo estacionado afuera del recinto, lo que evidencia la existencia de una red de apoyo.
Tras el hecho, la Fiscalía Regional de Valparaíso activó un operativo que ha ido más allá del "plan candado" inicial. Las autoridades han centrado la investigación en el rastreo y la intercepción de las comunicaciones de las familias y el círculo cercano de los reos, bajo la premisa de que los prófugos están en contacto con ellos para obtener ayuda.
El mayor Javier Oportus, comisario de la Segunda Comisaría de Valparaíso, aseguró que todas las líneas investigativas están abiertas y que el trabajo coordinado entre las instituciones es fundamental para lograr la recaptura de los tres delincuentes.
La evidencia biológica levantada del vehículo utilizado en la fuga es una de las principales pistas.
HISTORIAL DE LOS PRÓFUGOS
La fuga de los tres reclusos de la cárcel de Valparaíso no fue un hecho aislado, sino la culminación de un historial de comportamiento problemático. Gendarmería ha revelado los extensos antecedentes penitenciarios de dos de los reos que se evadieron usando una tirolesa.
Uno de ellos, Claudio Fornes, recibió una sanción de 20 días sin visitas pocos días antes de la fuga por haber participado en una riña. Su prontuario muestra que ya tenía tres castigos previos por infracciones graves como trepar un muro, participar en otra riña y portar o fabricar un arma blanca al interior del penal.
El historial de Jairo González es igualmente problemático. El reo, que ha pasado por las cárceles de Valdivia y La Serena, ha sido sancionado en múltiples ocasiones por amenazar a gendarmes, romper ventanas y por ser descubierto con teléfonos en tres oportunidades.
Estos antecedentes respaldan el esfuerzo de la Fiscalía Regional de Valparaíso y las policías, que mantienen un operativo de alta prioridad para recapturar a los tres delincuentes.
PURANOTICIA