En su declaración ante el fiscal y dos detectives de la PDI, José Stalin Atenas Gaete dio a conocer algunos detalles respecto a cómo operaba el grupo para originar incendios.
José Stalin Atenas Gaete, de 26 años, sería el presunto líder de la asociación ilícita acusada por el Ministerio Público de provocar una veintena de incendios en la región de Valparaíso, incluido el megaincendio de febrero de 2024 en el que fallecieron 136 personas, se destruyeron 8 mil casas y dejaron más de 20 mil damnificados.
A días de su formalización, instancia que se resolvió con su prisión preventiva –al igual que otros seis imputados en la causa– se dio a conocer un extracto de la declaración que entregó ante el fiscal especialista en incendios, Osvaldo Ossandón, y dos comisarios de la Policía de Investigaciones (PDI), en el marco de esta indagatoria.
El jefe de cuadrillas de la brigada mecanizada «Palma 30», de la Corporación Nacional Forestal (Conaf), relató –según El Mercurio– que "algunas veces le dije a Franco Pinto que hiciera incendios, ya que necesitaba –al igual que todos– más dinero".
"Si no los hay, se acaba la temporada y tampoco habrá horas extras. Y como Pinto era muy ambicioso, hablaba de grandezas, como un auto más caro y otro tipo de cosas. Siempre estaba dispuesto a realizar incendios forestales", agregó el sujeto de 26 años que operaba desde el interior de la Conaf generando incendios forestales.
José Atenas fue detenido a eso del mediodía del jueves 28 de noviembre en una pasarela del Troncal Urbano, arteria que conecta Viña del Mar con Quilpué, justamente las dos comunas que más daño y pérdida de vidas humanas registraron por el megaincendio. Su declaración, en tanto, la dio el cuartel Curauma de la PDI, instancia donde renunció a su derecho a guardar silencio para detallar cómo operaba la asociación ilícita.
El aparente líder de este verdadero «Cartel del Fuego» ingresó a Conaf el año 2016, desempeñándose allí hasta el año 2023, principalmente en una brigada que operaba en la Reserva Nacional Lago Peñuelas (RNLP). No obstante, fue el 2021 cuando comenzó a participar en la generación de incendios forestales, según su propia confesión.
Fue durante el verano de aquel año cuando conoció a Franco Pinto, ex brigadista de Conaf y primero de los detenidos en esta causa. Tanto él como los otros imputados, Maximiliano Véliz y Ángel Barahona, estaban bajo su mando en el organismo. Pinto y Vélez eran choferes de camioneta, mientras que Barahona trabajaba como brigadista. También trabajó algunos días con ellos otro de los imputados: Claudio Gamboa.
En esa instancia, Franco Pinto dijo a José Atenas –según su declaración al fiscal y los dos PDI– que "él, junto a otro sujeto del cual no tengo mayores antecedentes, ingresaron en motocicleta al interior del recinto de la RNLP, generando diversos focos de incendio en horario nocturno, los cuales se terminaron descontrolando y abarcando una gran superficie, llegando hasta la ciudad de Quilpué".
De igual forma, el imputado planteó que "se vanagloriaba para que yo me diera cuenta de su capacidad de generar incendios y para que yo lo autorizara a hacerlo en la jornada laboral. Para ello, salía en su vehículo particular, solo o con Barahona. Fue la primera vez que me enteré de la forma de operar".
Atenas también declaró que "en ese momento comprendí que la generación de incendios tenía la finalidad de obtener mayores ingresos económicos por horas extras", lo que explica que esta acción se ejecutara con combustible en días de calor y viento, y con topografías en pendiente, facilitando la propagación de las llamas.
Si bien, sostuvo que no le consta que personas de mayor rango del entro de operaciones de Conaf en «Palma 1» dieran órdenes a Franco Pinto para que causara incendios, sí reconoció que éste se jactaba de ser el "regalón" de un comandante de incidentes. Sobre este punto, indicó que Pinto fue acusado de robar combustible, pero que la autoridad lo ayudó para que siguiera como brigadista y, a la vez, autor de incendios.
En ese sentido, José Atenas explicó que era consciente de lo que Franco Pinto realizaba, "dado que como código me decía: 'Voy a dar una vuelta, a jugar a la pelota', y yo entendía que iba a hacer incendios. Siempre lo tuve claro". También confesó que Pinto les enseñó a fines de 2022 a elaborar artefactos incendiarios atando fósforos a cigarrillos, mecanismo hallado durante la detención de los tres primeros imputados.
Ángel Barahona, de 22 años, es otro de los imputados que decidió declarar. Se trata del jefe de cuadrilla de la brigada «Palma 8», también de Conaf, quien operaba en la Reserva Nacional Lago Peñuelas. El sujeto indicó que en la temporada 2021-2022 viajó junto a Franco Pinto y Elías Inostroza (ex Bombero y ex Senapred) a Quintay, donde los otros dos descendieron a recoger fierros dejados de un incendio anterior. Al día siguiente tuvo que combatir un incendio en el mismo lugar, por lo que de inmediato sospechó que fueron Pinto e Inostroza los que causaron la emergencia forestal.
Finalmente expuso que Pinto lo ha tratado de contactar desde la cárcel, diciéndole que "acordásemos una versión en común ante las posibles declaraciones relativas a sus incendios, indicándome que yo podría ser un testigo a su favor respecto de la investigación por el ocurrido el 2 de febrero de 2024 y los cargos que se le formulaban".
PURANOTICIA