
Ante las autoridades regionales, la empresa Chilquinta formalizó sus preparativos para responder a cualquier incidencia sobre el suministro eléctrico durante el verano.
Como una forma de dar a conocer los lineamientos y preparativos en la operación del suministro eléctrico de cara a la próxima temporada de verano, y los protocolos de respuesta ante posibles situaciones de emergencia, el Grupo de Empresas Chilquinta, en conjunto con la Delegación Presidencial Regional de Valparaíso, y la Seremi de Energía de Valparaíso, desarrolló el encuentro «Resiliencia Participativa en tiempos de cambio climático», instancia que convocó a representantes de organismos público-privados de los equipos de Gestión de Riesgo de Desastres y Seguridad Pública.
El objetivo de esta actividad fue mostrar las acciones preventivas que se comenzaron a ejecutar en la región de Valparaíso, tanto para el segmento de distribución como transmisión, con la finalidad de mantener el correcto funcionamiento de la infraestructura eléctrica durante los meses de altas temperaturas. El encuentro contó con las presentaciones de Michel de L’Herbe, especialista en gestión de emergencias, y Alejandra Vargas, ingeniera agrónoma y experta en arbolado urbano.
La seremi de Energía, Anastasia Ottone, señaló que “hemos sacado selecciones y es necesario que haya una gobernanza común, que todos participemos, desde lo local, lo regional, también a nivel central. Y por eso es importante que estas actividades se desarrollen con anticipación para prepararnos con las herramientas más adecuadas”.
Luis Sepúlveda, gerente de Operación Distribución de Chilquinta Distribución, sostuvo que "hemos realizado esta actividad en conjunto con la autoridad, con el fin de prepararnos para el verano que se avecina. Nosotros tenemos un plan preventivo que parte en agosto, con una intensificación de nuestras actividades preventivas en terreno, principalmente referente al arbolado”.
Bajo esta mirada, y como foco principal de este lanzamiento, se insistió en la necesidad de gestionar de manera conjunta y colaborativa la gestión de la resiliencia a nivel general para la región de Valparaíso, con miras a estar preparados para enfrentar de la mejor manera posible emergencias que podrían presentarse durante la temporada que se avecina, en un contexto de cambio climático extremo.
Michel de L’Herbe, especialista en gestión de emergencias, indicó que “hay una urgencia en fortalecer el relacionamiento entre comunidad, sector público y sector privado. Si seguimos fragmentados, sólo estamos construyendo más problemas durante un problema. Si queremos afrontar la solución en el antes, en el durante, e incluso, cuando nos impacta una emergencia en la recuperación, eso requiere involucramiento comunitario, debidamente encadenado con el sector privado y también liderado por el sector público. Eso es fundamental”.
ARBOLADO REGIONAL
Uno de los focos principales levantados en la exposición fue la imperante necesidad de observación y seguimiento al estado de salud del arbolado urbano-rural, de manera tal de poder realizar un manejo de vegetación oportuno, evitando de esta manera incidentes que no solo pueden afectar la continuidad del suministro eléctrico, sino también accidentes con daños a personas.
Alejandra Vargas, docente de la Universidad Católica (PUC), autora del estudio «Diagnóstico del arbolado urbano en la región de Valparaíso», que develó el alto grado de deterioro en que se encuentran los árboles, ratificó que “muchos de esos árboles están en proceso de deceso y eso pone en peligro a la población y a la infraestructura. Los principales problemas que tienen son ahuecamientos, pudriciones, problemas de anclaje y que ante cualquier eventualidad climática tienden a caer o engancharse”.
PURANOTICIA