Los funcionarios se acogieron a la Ley 20.976 que permite acceder a la bonificación por retiro voluntario.
Con un simbólico y emotivo acto se rindió homenaje a cerca de 50 profesores que dedicaron casi toda su vida laboral a la educación pública, enseñando en diferentes establecimientos municipales de Valparaíso.
Con la presencia del alcalde Jorge Sharp; de la directora de Educación, Silvana Sáez y de directivos educacionales y corporativos, se despidió a los docentes, algunos con más de 40 de servicio, agradeciéndoles a cada uno su trabajo en y por la educación pública porteña, donde cada día construyeron, a través de sus prácticas, la posibilidad de hacer de la educación una real herramienta de transformación de la realidad de los estudiantes y de disminuir las barreras de aprendizaje.
Al acto, realizado en el Salón de Honor del Edificio Consistorial, llegaron más de 20 homenajeados, quienes fueron pasando individualmente al escenario, para recibir el galvano de manos del alcalde Sharp, quien destacó la gran labor, vocación y entrega de los profesores del sistema municipal porteño.
"Creo que ésta es una forma de reconocer y dignificar la labor docente, vamos a seguir en esta senda y estoy muy contento de haber sido parte en este cierre de la etapa de la vida de estos tremendos profesores y profesoras de Valparaíso, que sin duda formaron a muchos de los que hoy día somos parte de esta ciudad. Un abrazo a ellos y a sus familias y que ojalá esta etapa que venga esté llena de alegrías y esperanzas", sostuvo el alcalde Sharp.
Gloria Tapia, quien estuvo más de 47 años trabajando en la educación pública y se acogió a retiro cuando era directora de la Escuela Ramón Barros Luco, se mostró muy contenta con el homenaje: "Es una satisfacción, yo creo que todos los profesores hemos estudiado y adoptado esta profesión pero por vocación, hay que amar lo que uno hace y eso a uno le reporta una gran felicidad de haber podido colaborar en formar personas íntegras, cuando uno ve a sus ex alumnos profesionales incorporados a la sociedad como hombres y mujeres de bien, es la mejor satisfacción que uno tiene", expresó la profesora.
Otro homenajeado fue Francisco Arancibia, también con 47 años de docencia, quien terminó su vida laboral siendo director (s) de la Escuela Ernesto Quirós Weber. "Estoy tremendamente agradecido, principalmente porque es primera vez que se toma en cuenta este trabajo de tantos años y en un grupo de profesores importante, esto demuestra un compromiso y un respeto por la educación de la comuna".
PURANOTICIA