La pulsera tiene un sensor de pulso y giroscopio, la que cuando se detectan alzas en las pulsaciones entra en modo de alerta.
Diego Ramírez, ingeniero informático egresado del campus San Felipe de la Universidad de Playa Ancha (UPLA), desarrolló, como parte de su proyecto de título, una pulsera para otorgar cierto grado de autonomía a pacientes con epilepsia.
La principal motivación para el desarrollo de este proyecto fue otorgar autonomía a estos pacientes, que sufren crisis tónico-clónicas, además de una solución asequible económicamente.
Ramírez fue guiado en el proceso por la ingeniera civil en informática, Tatiana Ilabaca, quien explicó que Diego llevó a cabo el proyecto de "diseño e implementación de pulsera y del software asociado para la detección y emisión de alertas frente a ataques epilépticos".
El joven, a su vez, indicó que "la idea de mi proyecto surgió a partir de un caso de epilepsia tónico-clónica presente en mi familia, que me hizo ver el impacto emocional que se genera en el paciente y su entorno. Entonces comprendí que ciertos pacientes necesitan de supervisión constante y que los dispositivos existentes que permiten alertar de la ocurrencia de una crisis a un tercero no se encuentran al alcance de la mayoría de la población en Chile por su alto costo".
Con este motivo, Diego Ramírez desarrolló una pulsera que cuenta con una batería de 12 horas de duración, pulsómetro y un giroscopio, los que realizan lecturas constantes del paciente, las cuales una vez cumplidas emiten una alerta, vía llamado y mensaje de texto a un tercero, con las coordenadas del paciente.
"La pulsera tiene un sensor de pulso y giroscopio y cuando se detectan alzas en las pulsaciones, en este caso una taquicardia y ciertos movimientos, entra en modo de alerta. Estas alertas se inician con un llamado que se realiza a un contacto, de una duración de cuatro segundos, se corta e inmediatamente después llega un mensaje de texto con las coordenadas en dónde la persona sufrió la crisis", explicó.
Con respecto a la diferencia con otros brazaletes Ramírez indicó que "mi pulsera incorpora un mecanismo de comunicación propio para poder llamar y enviar mensajes de texto y, además, cuenta con GPS. No necesita de un celular".
Actualmente el joven se encuentra puliendo los detalles de su pulsera e indicó que espera que este tipo de proyectos se hagan cada vez más comunes.
PURANOTICIA