Cerca de 800 millones de pesos están en jaque para garantizar seguridad a automovilistas y peatones de principal avenida que une a Viña del Mar con el Puerto.
Una de las primeras sorpresas que se llevó el Intendente Jorge Martínez, a horas de ser designado en su cargo, fue recibir la carpeta con la petición de un aumento de fondos para establecer nuevas obras para Avenida España, el proyecto más grande y bullado del Gobierno Regional de los últimos meses y que tiene a la principal vía que une a Valparaíso y Viña del Mar con una serie de problemas en el transito y con restricción vehicular en su uso.
La obra emblemática de la gestión de Gabriel Aldoney tiene un grave error que puede transformar a la avenida en una trampa mortal para los automovilistas y peatones que transitan por la vía.
La obra no había considerado en su diseño original, una serie de medidas de seguridad, considerando que la nueva capa asfáltica dejaba con muy poca diferencia a la calle con las veredas, como se aprecia actualmente en algunos sectores de la vía.
Días antes de dejar el cargo, el ex Intendente Aldoney presentó un oficio al Consejo Regional para generar un aumento de recursos que permitieran cubrir la inexplicable falla en el proyecto: un monto de $800 millones, que no fue considerado en el proyecto original.
Sin embargo, el cuerpo de consejeros regionales no vio con buenos ojos la petición, sobre todos los consejeros de la Democracia Cristiana quienes fueron muy críticos con el error cometido, dirigiendo sus dardos al actual director del Serviu, Carlos Contador, paradójicamente también militante de la colectividad.
Aquí comienzas las dudas de la negativa de los consejeros de la DC en apoyar el monto solicitado que aseguraría las medidas para la seguridad de peatones y automovilistas.
LA DC Y SUS PROBLEMAS CON EL SERVIU
Todo hace presagiar que la repentina negativa en apoyar al director del Serviu para conseguir el tan ansiado aumento de 800 millones en las obras podría ser una pasada de cuentas que se remonta a otra problemática que tiene su origen en San Antonio.
No sería sorpresa que próximamente se de a conocer del inicio de una investigación penal de parte del Ministerio Público, debido a una denuncia anónima realizada en noviembre de 2017 ante el Ministerio del Interior. Allí se detallarían eventuales irregularidades y hasta posibles delitos que pudieron ser cometidos en el Serviu y la delegación del Servicio en San Antonio en dos obras especificas.
La denuncia incluiría entre otros antecedentes recolectados que se habrían autorizados trabajos extras por parte de la delegada en favor de una empresa, sin estar autorizada para ello. Por ese motivo se abrió un sumario debido a que la funcionaria no tenía las competencias, lo que derivó en la máxima sanción disciplinaria: la destitución.
No obstante, luego de varias apelaciones se modificó la medida y se bajó a una sanción administrativa. Paralelamente el Director del Serviu negó el pago de los trabajos autorizados por la delegada provincial, lo que provocó severas diferencias entre las huestes DC locales de San Antonio, esa negativa en los pagos podría ser justamente la devuelta de manos que se hace ahora por parte de los consejeros regionales a los 800 millones de la avenida España, es decir empatar una decisión que a alguien desfavoreció en San Antonio y que tiene los ánimos más que revueltos dentro de la falange.
En el mes de diciembre de 2017, el Ministerio del Interior encabezado por Mario Fernández, también militante de la Democracia Cristiana, a través de su dirección jurídica envió todos los antecedentes del caso al Ministerio público, donde hoy la investigación es llevada por la unidad anticorrupción y afectaría a más de 6 funcionarios y ex funcionarios del Serviu, fundamentalmente por la adjudicación de varios contratos directos. Se indaga además en las unidades de inversiones y finanzas, no descartándose que inclusive esta investigación en curso pueda llegar a las obras de la Avenida España.
Por su parte el Intendente Martínez antes diversas informaciones sobre los trabajos de Avenida España, optó por lo sano y solicitó al Contralor Regional realizar una auditoría al proyecto y sus obras, de modo de despejar cualquier duda y transparentar los pasos que permitieran defender el aumento de recursos que sigue en stand bye y por tanto sin las medidas de seguridad necesarias, manteniendo el riesgo actual que puede significar que la capa asfáltica tenga la misma altura que la vereda.
PURANOTICIA