No obstante, la jefa comunal de Viña del Mar manifestó su deseo de adquirir el inmueble declarado Monumento Histórico Nacional.
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Los rumores de que la Municipalidad de Viña del Mar compraría la Casa Italia para instalar en este inmueble el nuevo edificio consistorial parecen derrumbarse, luego que la alcaldesa Virginia Reginato manifestara que su intención es comprar este Monumento Histórico Nacional, pero no para albergar las nuevas dependencias municipales.
Todo comenzó cuando el director de la inmobiliaria Casa Italia S.A., Renzo Arata, planteara que "Viña puede tener uno de los edificios consistoriales más hermosos de nuestro país. Esperamos que el Estado, la Municipalidad y nuestros accionistas estén a la altura y el proyecto finalmente se concrete".
No obstante, la jefa comunal viñamarina dijo al Mercurio de Valparaíso que "en primer lugar, me alegro que ya estemos en línea recta pensando en comprar la Casa Italia. Yo no estoy pensando en la casa consistorial, y por supuesto que hay muchas otras direcciones que pueden funcionar ahí. Es un espacio bastante grande e indudablemente el edificio es maravilloso, pero no estoy pensando comprarlo para la casa consistorial".
De igual forma, Reginato dijo que "es una posibilidad, pero no es algo que buscamos. No quiero que se piense que nosotros la vamos a comprar para que esté la Municipalidad ahí, porque tenemos otras opciones: el centro de la cultura, del turismo. Hay tantas direcciones que están trabajando en sectores apiñados y se tienen que lucir. Turismo ahí sería, para mí, maravilloso. El Convention Bureau, la dirección de Turismo, por ejemplo".
"Mi sueño es poder comprar la Casa Italia, estoy empeñada en eso. Estamos por el camino recto en eso. Vamos a pagar lo que corresponde. No vamos a pagar migajas porque la Casa Italia no son migajas, vamos a pagar lo que corresponde", cerró la alcaldesa de Viña del Mar.
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