El servicio investigará una denuncia por una posible adulteración de mortalidades de los salmones de parte de la empresa.
Este jueves, el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura inició una investigación para determinar la veracidad de la denuncia sobre una posible adulteración de mortalidades de los salmones informados por la empresa Nova Austral al Sistema de Información para la fiscalización de la acuicultura (SIFA).
El Servicio catalogó como "gravísimos" los antecedentes recibidos en el marco de una investigación periodística que, de comprobarse, infringen severamente la normativa sanitaria establecida para la operación de los centros de cultivos en la salmonicultura.
A través de una publicación de El Mostrador, se develó una serie de documentos y correos electrónicos con información reservada que revelan que la empresa de capitales noruegos y certificada por sus supuestos estándares sustentables, manipularon las estadísticas de mortalidad de sus salmones para ocultar cifras reales a Sernapesca, la autoridad encargada de la fiscalización.
Explican que Nova Austral habría generado una doble contabilidad -con cifras reales y falsas- para evitar las multas, mantener sus utilidades y su cartel de empresa "green", más aún considerando que -de acuerdo a la propia compañía- los consumidores premian su comportamiento pagando entre un 10% y 20% adicional por sus productos.
En particular, los cuestionamientos apuntan a su operación al interior del Parque Nacional Alberto de Agostini, en la región de Magallanes.
Marcela Lara, subdirectora de Acuicultura, informó que el Servicio activó una revisión inmediata de los antecedentes y que requerirá a la empresa en el transcurso de la jornada complementar la información y determinar eventuales responsabilidades. Asimismo, sostuvo que se realizará una auditoría en relación a las mortalidades reportadas.
"De ser veraz esta denuncia, esta conducta atenta seriamente contra la transparencia en el ámbito sanitario y ambiental, y como Servicio tomaremos todas las acciones legales correspondientes, ya que estas malas prácticas ponen en peligro los pasos sustanciales que se han logrado para avanzar hacia una acuicultura sustentable.
Sernapesca detalla que las empresas tienen la obligación de declarar sus mortalidades según establece el Programa General de Mortalidades; el Reglamento Sanitario para la Acuicultura (RESA) y la Ley General de Pesca Acuicultura, medida que se implementó como una estrategia de detección temprana de brotes de enfermedades post crisis del virus ISA.
"Dado lo esencial del reporte de las mortalidades y las causas de estas, Sernapesca realiza un seguimiento continuo de los centros de cultivo y en caso de evidenciar mortalidades elevadas o algún problema sanitario, implementa campañas sanitarias, en lo que va del año se han realizado campañas asociadas al caso de ISA que presentó la región y la segunda en curso a las declaraciones de cargas parasitarias para Caligidosis", señalaron en un comunicado.
Finalmente, repudiaron "todo tipo de conductas, incluidas las objeto de la denuncia, que puedan poner en riesgo" la protección permanente del patrimonio ambiental y sanitario del país.
PURANOTICIA