La decisión dejará sin empleo a 600 trabajadores, que en época de mayor cosecha podían llegar a 1.000.
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La empresa Agrícola Campillay anunció el cierre de sus puertas por falta de solvencia, e inversiones que no ha podido realizar por las afectaciones en sus terrenos y la producción de uva.
Según información del Diario de Atacama, el cese definitivo de las operaciones está programado para el 1 de junio.
Indican que la firma tenía deudas que no pudo solventar. Además, según su dueño Omar Campillay, los aluviones que afectaron al Valle del Huaco en 2015 y 2017 incidieron negativamente en sus terrenos y la producción de uva.
Campillay agregó que el mercado "ha cambiado y requiere más inversión, replantaciones, nuevas variedades", algo que no pudieron costear.
El empresario detalló al medio que la decisión dejará sin empleo a 600 trabajadores, que en época de mayor cosecha podían llegar a 1.000.
Campillay lamentó la carencia de estatutos que resguarden a las empresas locales. "(...) No debo impuestos, he llevado todos los pagos al día (...), no hay leyes que protejan cuando una empresa tiene insolvencia, todo lo contrario, los bancos te cierran la puerta", sentenció.
Luego de conocer la decisión, la Asociación Gremial de Agricultores de la Provincia del Huasco, -a través de su presidente, Herman Von Mayerberger-, reconoció que la empresa se esforzó por evitar esta situación. Coincidieron en que faltan leyes y políticas agrarias que resguarden lo local.
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