Gloria Ana Chevesich desmintió que exista un "gallito" con el Ejecutivo y que las resoluciones se efectúan "caso a caso". Asimismo, recordó que las expulsiones masivas están prohibidas y señaló no entender bien en qué consiste el "Plan Colchane".
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Luego que desde el Ministerio del Interior se acusaran cambios de criterio en los fallos migratorios, ha crecido la controversia entre la Corte Suprema y La Moneda por las expulsiones grupales de migrantes en situación irregular que se han realizado los últimos meses.
Sin embargo, la vocera y jueza del máximo tribunal, Gloria Ana Chevesich, desmintió que exista un "gallito" con el Ejecutivo y que las resoluciones se efectúan "caso a caso". Asimismo, recordó que las expulsiones masivas están prohibidas y señaló no entender bien en qué consiste el "Plan Colchane".
En entrevista con radio Universo, la jueza indicó que "parece que el Plan Colchane se traduce simplemente en una expulsión masiva. Para qué ponerle plan Colchane, mejor póngale otro nombre".
Puntualizando que a su parecer un plan significa "una idea un poco más amplia, que abarque más aspectos para solucionar la crisis migratoria, pero no se puede traducir simplemente en expulsar a la gente. Como me dicen que 'lo estoy haciendo mal' porque a la larga parece que eso es, parece que el plan habría que estudiarlo, analizarlo. En realidad no sé en qué consiste el plan Colchane, discúlpeme", dijo, y agregó luego que "Quien debe decidir son los tribunales del país".
A la jueza le consultaron también su parecer de los dichos del ministro del Interior, Rodrigo Delgado, quien aseguró que "hay 20 mil órdenes de expulsión y que se van a ejecutar todas". Esto podría provocar una "avalancha de recursos de amparo", por lo que Chevesich respondió que "me imagino que las personas que se sienten afectadas con esta decisión la impugnarán por la vía del recurso de amparo y tendrán que ser las Cortes las que decidan. Esto no es un gallito, es el afectado el que tiene la posibilidad de reclamar y tiene derecho a que se emita un pronunciamiento judicial".
"No es un gallito porque como estoy diciendo, aquí no se resuelve de manera conjunta, es análisis uno a uno y en algunos casos efectivamente las Cortes lo acogen y en otros se rechaza y eso es lo mismo que pasa en la Suprema", añadió.
La magistrado también aclaró que "no puedo decir en este momento quién puede ser expulsada o no del país. Yo soy vocera, mi labor como vocera es decir lo que piensa la Corte Suprema. Si tú me dices el caso concreto yo lo resolveré en su momento, pero no puedo estar anticipando opiniones".
También le respondió directamente a los dichos del subsecretario del Interior Juan Francisco Galli, quien indicó que es una decisión equivocada que la Corte Suprema haya revocado algunas de estas expulsiones, que es una señal de impunidad que transmite que "se puede entrar ilegalmente al país y que nadie los va a echar" apuntando a que incluso es por ello que se ha producido la ola de ingresos en el norte del país.
"Los conceptos que utiliza el Poder Judicial es el pleno respeto de la normativa nacional e internacional, o sea en la medida en que se adopte una decisión de la autoridad que está en contra de esta normativa obviamente se va a acoger", afirmó la jueza, y añadió: "Cómo va ser una mala señal que el máximo tribunal del país diga que hay que respetar las normas, debería ser todo lo contrario, es una buena señal y en el caso concreto cuando se adopte de que se revoque una decisión de la autoridad administrativa es la obligación que le corresponde, es la misión que tiene el Poder Judicial hacer que se respeten las leyes".
"Yo no puedo entrar a criticar la labor de las autoridades la Corte Suprema en general y yo en particular soy muy respetuosa de las decisiones, pero cuando viene el momento de los 'qué hubo' hay que poner las cosas en su lugar y para eso están las leyes que rigen. Para ellos como Gobierno es una mala señal porque obviamente a nadie le gusta que le modifiquen o revoquen y dejen sin efecto sus decisiones", cerró.
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