Los pequeños serían sobrinos de Cisarro, el “símbolo” de la complejidad de la delincuencia juvenil. Se investiga si fueron abusados por el padrastro que seguirá detenido hasta el lunes.
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Un decidor vínculo familiar tenía el pequeño de cuatro años que fue encontrado muerto la tarde del 02 de julio en su hogar en la villa Angelmó de San Bernardo.
El llamado "niño símbolo" de la complejidad del problema de la delincuencia juvenil, Cristóbal "Cisarro", adolescente que pasó por distintos centros del Servicio Nacional de Menores (Sename) y que cuenta con una serie de arrestos por diversos delitos, sería su tío.
El pequeño fallecido, el quinto de seis hermanos, habría sido asesinado a golpes y violado por su padrastro, un sujeto de 46 años con antecedentes penales que fue aprehendido por la Policía de Investigaciones. El plazo de detención del supuesto homicida, identificado como Osvaldo Quiroz, fue extendido hasta el lunes por el Juzgado de Garantía de San Bernardo a solicitud de la Fiscalía Metropolitana Occidente. El sujeto es indagado además por tráfico ya que encontraron 200 gramos de pasta base de cocaína en su poder.
Según informó La Cuarta, la intervención de la PDI fue motivada por la denuncia de vecinos respecto al relato de la hermana menor de la víctima, una pequeña de tres años de edad que acusaba haber sido tocada en sus genitales por su padrastro. Ella y sus hermanos de 07 y 11 años habrían presenciado el crimen que terminó con la vida de un miembro más de la familia. Otros dos hijos de la madre de estos niños habían fallecido anteriormente, uno por muerte natural y otro en un accidente.
El jefe del Programa de Apoyo a Víctimas de la Subsecretaría de Prevención del Delito, Antonio Saavedra, explicó que la Fiscalía Metropolitana Occidente entregó a la repartición que él encabeza la custodia de los tres menores y que fueron presentados al Tribunal de Familia para que determine una medida de protección para los tres.
En el intertanto se hicieron gestiones con el Servicio Nacional de Menores para que ingresen en una unidad dependiente de esa entidad, precisó Saavedra, señalando además que en virtud del análisis de los hechos se presentarán las querellas correspondientes.
La autoridad sostuvo que el entorno familiar de estos niños es "muy complejo" y no existiría un adulto responsable que se hiciera cargo de los tres pequeños.
"Tenemos entendido que la madre de los menores era tía del conocido Cisarro, entonces lógicamente, aparentemente, el entorno familiar en el cual se desarrollan estos hechos es muy vulnerable", planteó Saavedra.
El subcomisario de la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones Rodrigo Reyes Avilés, confirmó que los niños concurrieron al Servicio Médico Legal "a fin de realizarles las pericias de rigor en virtud de ver si hay lesiones atribuibles a algún tipo de agresión sexual".
"La mamá de estos menores tiene seis hijos, de los cuales ya habían dos fallecidos previamente por otros hechos, uno por un accidente y otro de una muerte natural y este último por un hecho obviamente de un delito violento. Entonces, ante eso, el fiscal determinó que ella, independiente que hasta el momento no se le ha atribuido ninguna responsabilidad penal, no está en condiciones de mantener la custodia, y por otro lado, la abuela tampoco, en consideración de varios antecedentes que el Ministerio Público manejaba", reveló el subcomisario de la BH, en un relato que haría alusión a Jacqueline Morales, la madre de Cisarro.
Pn/ci
AGENCIA UNO
