Los textos escolares siguen siendo el ítem más costoso para los apoderados en los colegios que no optan por los textos del Mineduc, alcanzando entre un 62% y un 85% del total de una canasta escolar.
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Con el propósito de ayudar en lograr un mayor rendimiento del presupuesto familiar, considerando el complejo escenario económico debido a la pandemia, el SERNAC realizó estudios de precios de textos, útiles y uniformes escolares.
Además, el Servicio realizó un análisis de las medidas que han tomado los colegios para disminuir los costos que deben asumir los padres al inicio del ciclo escolar, detectando la implementación de una serie de políticas, entre ellas, migración a textos on-line y textos escolares propios.
En el caso de las editoriales destacan convenios especiales con colegios para adquirir textos más baratos y la disposición de textos en formato digital.
El Director Nacional del SERNAC (s), Jean Pierre Couchot, acompañado del superintendente de Educación, Cristián O'Ryan, explicó que este nuevo año escolar presenta muchas dificultades para las familias, debido tanto a razones sanitarias como económicas producto de la pandemia, por lo que el Servicio ha utilizado todas sus herramientas en favor de la ciudadanía.
"En este nuevo año escolar que se inicia, marcado por los terribles efectos que ha provocado la pandemia en nuestro país, hemos empleado todas nuestras herramientas y facultades para contribuir a que las familias puedan sacarle el mayor rendimiento posible a su presupuesto familiar", destacó Couchot.
Considerando que los textos escolares siguen siendo el ítem más costoso para los colegios que no optan por los textos MINEDUC, que concentra entre el 61,4% y el 84,6% del total de una canasta escolar, el SERNAC ofició a más de 150 colegios para conocer las políticas a aplicar este año 2021, considerando los efectos de la pandemia en las familias.
Al analizar las respuestas, un 74,8% de los establecimientos indicaron que generaron instancias de diálogo, lo que refleja la intención y disposición de considerar las diversas opiniones de la comunidad escolar al momento de adoptar decisiones académicas, considerando la realidad sanitaria nacional y el contexto económico que ha provocado en el presupuesto de las familias.
Respecto a las acciones impulsadas para transparentar el proceso interno de selección de textos escolares, un 41,7% de los establecimientos indica que consideró a los profesores, directivos y/o centro de padres, desarrollando un proceso participativo. Además, un 33% no cambiarán los textos.
En relación a las acciones para informar oportunamente los cambios de textos escolares o proyectos educativos, un 46,3% ha comunicado la información por diversas vías (reuniones de apoderados, centros de padres, lista de útiles, entre otras); mientras que un 11,9% indica que lo ha publicado en sus sitios web institucionales o comunicado por medio de correos electrónicos.
Asimismo, los establecimientos informaron que tomaron una serie de medidas para disminuir gastos en textos escolares, entre ellas, la migración a textos on-line, la utilización de textos escolares propios y el no uso de textos escolares.
Sobre esta materia, el superintendente Cristián O'Ryan destacó que "en noviembre de 2020 enviamos una circular con recomendaciones a los establecimientos particulares pagados para que transparentaran a los padres y apoderados las decisiones en cuanto al contenido, calidad y características de los textos escolares, y la fundamentación de su elección, como una manera de garantizar un acceso más justo y libre a una educación de calidad, respetando al mismo tiempo la autonomía de cada proyecto educativo".
Por su parte, las editoriales informaron al SERNAC acciones tendientes a promocionar textos del MINEDUC. Se trata de SM y Malva, empresas que entregaron autorización extraordinaria al Ministerio para que dispusiera de manera libre y gratuita la totalidad de los textos adjudicados en las licitaciones vigentes.
Por su parte, Santillana indica que tiene en formatos digitales los textos públicos y ha implementado la venta en, al menos cuatro colegios, de los textos del MINEDUC a un valor comercial, lo que lleva a que una familia de un niño/a de 2do básico pueda ahorrarse hasta 1/3 del costo de una canasta promedio de textos escolares, por los menores valores que poseen estos textos.
El SERNAC realizó durante el mes de enero un sondeo de precios de textos escolares en las principales editoriales, librerías y supermercados de la Región Metropolitana.
Para el análisis de los precios se seleccionaron las asignaturas que tuvieran textos escolares principales, tomando para el ejercicio un curso de segundo básico.
Los resultados indican que los textos de inglés son en promedio los más económicos. En el resto de las asignaturas, el promedio de los textos es de aproximadamente $34.000.
Por otro lado, se detectó que no existen diferencias significativas en los precios de un mismo libro entre los diversos tipos de establecimientos que los comercializan (editoriales, librerías, supermercados), salvo algunos ejemplares de matemáticas de Santillana que pueden presentar diferencias de hasta $8 mil entre una tienda y otra.
Finalmente, considerando todos los textos principales para un niño o niña de segundo básico, una familia puede gastar entre $140 mil y $164 mil.
El estudio del SERNAC consideró los precios del mes de enero de útiles escolares de las principales librerías, tiendas especializadas y supermercados de la Región Metropolitana.
En esta ocasión, este estudio consideró dos listas pensando en la reutilización de los artículos del año pasado: una normal (22 productos) y otra reducida (10 productos).
Al analizar los valores, en promedio, se puede destacar que una familia se puede ahorrar $6.738 en caso de optar por los precios más económicos de una canasta reducida de útiles escolares respecto de una completa. Una canasta reducida alcanza un valor de $9.481, mientras que la canasta completa un precio de $16.219.
En relación a las listas de útiles escolares, el superintendente O'Ryan reiteró que en enero de 2021 se hizo un llamado a los establecimientos del país para reutilizar algunos materiales del año pasado. "Es importante que los colegios sintonicen con las necesidades de las familias y soliciten lo estrictamente necesario para no sobrecargar el bolsillo de los padres y apoderados, considerando las dificultades económicas que muchas familias han debido enfrentar como consecuencia de la pandemia", sostuvo.
En este aspecto, O'Ryan recalcó que la normativa educacional establece que ningún colegio del país puede solicitar artículos de aseo y de oficina, y tampoco puede obligar o inducir la compra de determinadas marcas en algunas empresas o locales comerciales.
El estudio de uniformes escolares se realizó con información disponible durante el mes de enero en las principales multitiendas y supermercados de la Región Metropolitana.
Al igual que en el caso de los útiles, en el caso de los uniformes, el estudio del SERNAC consideró dos tipos de canastas: una reducida (2 blusas o camisas; 1 pantalón o jumper; 1 par de zapatos; 1 cotona o delantal; y 1 polar). Por su parte, la canasta completa incluye 4 blusas o camisas; 2 pantalones o jumpers; 1 par de zapatos; 1 cotona o delantal; y 1 polar.
Al analizar los precios, la canasta reducida tuvo un valor promedio de $34.015, mientras que la canasta completa un precio de $45.490 en el caso de niños.
Por otro lado, si las familias de colegios particulares optan por comprar las prendas con diseños institucionales para los colegios, una canasta equivalente puede llegar a los $103.671, en promedio, para un niño de 2do básico, esto sin considerar zapatos.
En esta materia, el superintendente de Educación recomendó a los establecimientos flexibilizar el uso del uniforme ante el actual escenario de crisis sanitaria y recordó a las familias que "si se establece su obligatoriedad debe ser una decisión tomada entre el establecimiento, Centro de Padres y Consejo de Profesores, previa consulta al Centro de Alumnos y Comité de Seguridad, por lo que las normas sobre su uso deben estar claramente señaladas en el Reglamento Interno y si existe algún cambio de uniforme, el establecimiento deberá comunicarlo en marzo de cada año".
PURANOTICIA
