Doce organizaciones expusieron hoy en la comisión de Trabajo del Senado, en el marco del estudio del proyecto.
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Los representantes de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA) manifestaron que este proyecto modifica el Código del Trabajo desde una perspectiva urbana, sin tomar en consideración la realidad de la actividad agrícola.
En su opinión, se debería legislar para contar con un estatuto especial que rija a todos los trabajadores agrícolas, pues les preocupa el impacto que pueda tener este "código urbano" en el mundo rural.
Solicitaron que se excluya al sector agrícola de las normas de negociación colectiva y aseguraron que están convencidos que la negociación tiene que ser dentro de la empresa, pues consideran inconveniente que se haga por rama o interempresas.
A su turno, la Unión Nacional de Organizaciones de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Unapyme) manifestó estar de acuerdo con la reforma laboral, que se apoye en los derechos colectivos de los trabajadores, que sea inclusiva con estas empresas y que no se implemente con un trato diferenciado hacia las mipymes.
Los representantes de los gremios de la pequeña industria, feriantes, distribuidores de combustibles, organismos de capacitación, agricultura familiar campesina, taxis colectivos y transporte menor manifestaron estar de acuerdo con una norma que amplíe los derechos de los trabajadores para conseguir mejor bienestar e ingresos, porque ello ayuda y activa el mercado interno, destino principal de los bienes y servicios de las empresas de menor tamaño. Asimismo, señalaron la importancia de que la capacitación llegue a los trabajadores y también al micro y pequeño empresario.
Luego, la Coordinadora Nacional Sindicatos Interempresas que acoge a los 15 sindicatos más grandes del país se refirió a los avances de la reforma, señalando que la titularidad sindical es un avance importante e imprescindible.
Asimismo, señalaron que la propuesta que tienen para modificar las materias de negociación colectiva buscan un trato laboral justo, y sin discriminaciones en su derecho a negociar en su calidad de sindicatos interempresas.
Insistieron en la necesidad de derogar las normas que dejan a voluntad del empleador la facultad de negociar en forma reglada con un sindicato interempresa.
En tanto, los representantes de Confederación Nacional de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Conapyme) manifestaron que esta reforma es injusta para el sector de las pymes, va a concentrar aún más la economía y dota de atribuciones excesivas a la Dirección del Trabajo.
Asimismo, señalaron que considera un exceso de atribuciones a los sindicatos y no a la contraparte. Agregaron que existe una disparidad entre sindicato interempresa y una pyme y que no se puede pretender la misma capacidad sindical o el mismo poder sindical una roticería de una ciudad cualquiera y a una gran cadena de supermercados.
Por su parte, la Asociación de Bancos e Instituciones Financieras manifestó que apoya los mejoramientos que contribuyan a relaciones laborales sustentables, pero manifestó que con esta reforma habrá trabajadores con distintos niveles de beneficios y de remuneraciones, dependiendo de si están o no sindicalizados, lo que en su opinión generar un clima laboral complejo.
Agregaron que se debe evitar en llegar a una fragmentación que implique que en vez de mejorar la productividad y la igualdad se vaya en el sentido inverso.
En tanto, la Confederación de Sindicatos Bancarios y Afines señaló que es absolutamente necesaria una reforma laboral, pues actualmente los sindicatos están restringidos a lo mínimo, con escaso margen de acción.
Manifestaron que actualmente se lleva a los sindicatos a una institución prácticamente debilitada frente al nivel empresarial y señalaron que a nivel financiero, la negociación colectiva prácticamente no existe.
Asimismo, manifestaron que les parece un despropósito que se extienda los beneficios logrados por los sindicatos a quienes no están afiliados a ellos y solicitaron que se eliminen los pactos de adaptabilidad.
Pn/fg
ATON CHILE.
