Por un lado, el ministro Ampuero dijo que "migrar es un derecho humano", mientras que el subsecretario Ubilla planteó todo lo contrario.
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Luego de la discrepancia generada en el Gobierno por las declaraciones del ministro de Relaciones Exteriores, Roberto Ampuero, quien sostuvo que "migrar es un derecho humano", y del subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla, quien señaló todo lo contrario; hoy, el presidente Sebastián Piñera salió a aclarar esta doble versión del hecho.
Al respecto, comentó que "este Presidente, con el apoyo de la inmensa mayoría de los chilenos, estamos promoviendo una política para poner orden en nuestra casa".
De igual forma, indicó que "toda persona tiene derecho a dejar o abandonar su país, pero también todo país tiene derecho a ordenar su casa".
Tras estas palabras del Mandatario, el propio canciller Ampuero salió ante la prensa a aclarar sus dichos, diciendo que "no hay contradicciones con el Presidente". Además, planteó que el Gobierno "tiene un compromiso con los derechos humanos de todos, incluyendo a los migrantes (...) una persona puede y tiene la libertad de irse en el país donde vive y reside".
También dijo que el Ejecutivo está "muy tranquilo", por la decisión que tomó, y precisó que tienen países que son referentes para el Gobierno en materia de migración. "Lo mas importante es que Chile tiene que fijarse en cuáles son sus derechos y cuáles son sus intereses", reseñó el ministro.
Finalmente, insistió en que no hay presiones, y hay una sola posición: "la del Gobierno de Chile", y que es el Presidente quien tiene la decisión final, una vez haya considerado "los escenarios", entregados por los distintos ministerios y asesores.
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