El Mandatario también confesó que pensó en nombrarlo capellán de La Moneda, pero que el mismo sacerdote le dijo que "no, porque estaba muy viejo".
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El presidente Sebastián Piñera reveló que sintió un "dolor profundo" tras conocer los casos de abusos sexuales que cometió el fallecido sacerdote Renato Poblete, a quien también reconoció como una persona que admiraba.
En conversación con el matinal de Mega, «Mucho gusto», el Mandatario aseguró que "uno necesita en la vida tener referentes, personas en las cuales uno confía, quiere, aprecia, admira. El padre Poblete era eso, el padre Poblete era uno de ellos para mí".
"Yo era bien amigo del padre Poblete y no lo voy a negar (...) yo sí lo quise y lo admiré. Incluso, Poblete estaba muriéndose en el hospital clínico de la UC, nosotros estábamos entre la primera y la segunda vuelta de la elección presidencial (de su primer mandato), y yo lo fui a ver y conversamos un largo rato y me dijo 'Sebastían, ¿usted viene por cariño o por interés político?', porque en ese momento, ser cercano al padre Poblete era un activo", agregó el jefe de Estado.
En esa línea, Piñera dijo que le respondió "'por las dos'. Y después de que fui electo en segunda vuelta, volví a ir a verlo. Ya estaba muy mal, muriéndose, y le dije 've, padre. Ahora vuelvo y no me puede hacer la misma pregunta porque ya fui elegido Presidente de Chile. Vuelvo porque le tengo cariño'. Incluso yo pensé en nombrarlo capellán de La Moneda y él me dijo 'no, ya estoy muy viejo, ya estoy para el otro mundo'".
Además, el gobernante reveló que nombró el parque fluvial de Quinta Normal como 'Renato Poblete' porque "lo que yo sabía de él, había sido un hombre que había dedicado su vida a ayudar a los más pobres, al Hogar de Cristo. Yo fui consejero del Hogar de Cristo y conocí la obra del padre Poblete".
"Pero cuando conocí esta otra historia, yo sentí un dolor profundo, una decepción profunda. Cuando hay una persona que uno aprecia y admira, y de repente descubres que no era la persona que uno conocía, uno siente mucho dolor, mucha frustración y un poco de rabia porque, como uno dice, nos engañó a todos".
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