Según cifras de la OCDE de 2018, Chile es el sexto país en que más horas se trabaja, con 1.941 horas promedio por trabajador.
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El debate por la reducción de las horas de la jornada laboral se ha tomado la agenda y las discusiones. Mientras la oposición, y parte del oficialismo, apoya reducir a 40 horas semanales la jornada, desde el Gobierno y los empresarios abogan por una "flexibilidad" laboral.
Más allá de qué proyecto termine finalmente aprobándose en el Congreso, lo cierto es que hay datos empíricos que aportan a la discusión.
Primero, según cifras de la OCDE de 2018, Chile es el sexto país en que más horas se trabaja, con 1.941 horas promedio por trabajador. Esto se compara con países como Australia – última en el listado- donde se trabaja 1.665 horas.
Otro dato importante es que los trabajadores en Santiago pasan el equivalente a 14 días al año en el transporte público, según un estudio del año 2016 que cita La Tercera.
El promedio en los países de la OCDE, es algo menos de 40 minutos al día en ir y volver de su empleo. En Chile, en cambio, la cifra es de cerca de 90 minutos, lo que se suma de alguna manera a la jornada laboral.
En ese escenario, parlamentarios que apoyan la reducción de la jornada laboral abogan a que hay aspectos sociales que avalan esta medida.
Dedicar tiempo al deporte, a la familia, a sociabilizar con amigos, son solo algunas de las cosas que se podrían hacer con una hora más al día libre.
Al respecto, Trinidad Romero, psicóloga de la U. Diego Portales y coach de Sureste.cl, asegura a La Tercera que a la familia chilena promedio lo que le falta es "tiempo doméstico". Por ello, tienen que designar ciertas tareas como ir al supermercado, lavar ropa, organizar temas importantes de la escolaridad a los fines de semana, "así que probablemente, una hora más al día podría significar que eso que se hace el fin de semana se pueda hacer en la semana y que el fin de semana puedan descansar".
Por su parte, Wenceslao Unanue, profesor de la Universidad Adolfo Ibáñez y director del Instituto del Bienestar, señala que este tiempo extra podría permitir afianzar vínculos sociales, como las relaciones con los amigos, con la familia y altruismo con la sociedad. "La gente seguramente dormirá, descansará, otros irán a bares y quizás algunos trabajarán unas horas más para ganarse unos pesos extras", dice.
Todo esto tendrá un impacto positivo en la salud mental de cada una de las personas, lo que conllevará a mejorar la productividad en el trabajo, "porque si podemos descansar más tiempo el fin de semana, llegamos con menos agotamiento mental desde el lunes", agrega la psicóloga Romero.
Según La Tercera, hay algunas empresas en el país donde se trabaja 40 horas. Por ejemplo, la compañía de celulares WOM, cuenta desde 2015 con una jornada laboral de 40 horas semanales.
"Llevamos más de cuatro años con este sistema y hasta el momento ha traído beneficios. Sin embargo, para que eso se cumpla es importante que nuestros colaboradores puedan organizarse para llegar a sus metas diariamente en horarios determinados. Lo importante no es la cantidad de horas, sino la calidad de su trabajo y su compromiso con lo que hace", explica Sandra Díaz, directora de Valor Humano de WOM.
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