En la actividad participaron de Agrupación de Familiares y Ejecutados Políticos del Biobío, la Sociedad Mutualista Bautista Van Schouwen Vasey, la organización Memorias del Biobío, la Corporación Memorial para los Derechos Humanos y la Corporación Sebastián Acevedo.
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Tras el ataque del que fue objeto el Memorial por los Detenidos Desaparecidos de Concepción, el director del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), Sergio Micco, acudió al hito reparatorio junto a organizaciones de defensa de los derechos fundamentales.
En la actividad participaron de Agrupación de Familiares y Ejecutados Políticos del Biobío, la Sociedad Mutualista Bautista Van Schouwen Vasey, la organización Memorias del Biobío, la Corporación Memorial para los Derechos Humanos y la Corporación Sebastián Acevedo.
En la ocasión Sergio Micco condenó el ataque al memorial, señalando que "vulnerar y vandalizar sitios de memoria que recuerdan a las personas que fueron desparecidas cuyos cadáveres aún no sabemos dónde están, a personas ejecutadas políticas sin debido proceso y sin respetar los más elementales a los derechos humanos, es un acto repudiable contra la civilización y contra la humanidad. Este es un sitio sagrado y lo sagrado es insacrificable, la memoria no se puede sacrificar".
En la misma línea, el director del INDH señaló que el ataque al sitio de memoria "no solamente atenta contra los familiares de las personas que vivieron el horror y la injustica, sino que contra toda la sociedad".
Sergio Micco recordó la importancia de los sitios de memoria, señalando que "uno de los lugares donde más violenta y masivamente se violaron los derechos humanos fue acá Concepción. Yo soy hijo de esta tierra, participé en una lucha por las violaciones a los derechos humanos con personas maravillosas, este un lugar cargado de simbolismo que recuerda lo que ocurrió en Chile de Arica a Punta Arenas".
El Memorial por los Detenidos Desaparecidos de Concepción, ubicado en el Parque Bicentenario de la capital del Biobío, fue atacado a través de rayados con insultos y símbolos alusivos a un grupo de extrema derecha.
También fue dañado un mural en recuerdo del Presidente Salvador Allende, en el que -según la denuncia de ciudadanos- los atacantes habrían dejado excrementos a los pies del hito de memoria.
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