Obispado de San Felipe emitió una declaración pública donde aseguran que desconocían esta indagatoria.
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Luego que el diario La Tercera informara este jueves que la Fiscalía se encuentra investigando por casos de abusos sexuales a menores a los obispos de San Felipe, Cristián Contreras Molina, y de Aysén, Luis Infanti de la Mora, el Obispado de San Felipe emitió una declaración pública donde aseguran que desconocían esta indagatoria.
Según la publicación de La Tercera, Contreras sería investigado como presunto autor, mientras que Infanti figuraría en calidad de supuesto encubridor en causas distintas.
En el comunicado del Obispado de San Falipe se indica que "El jueves 13 de septiembre se ha informado en un medio de comunicación nacional sobre una investigación en curso en contra del obispo diocesano, Cristian Contreras Molina por un delito de connotación sexual".
"El obispo solo conoce la existencia de dicha investigación por la mencionada publicación periodística, por lo que solicitará estos antecedentes al Ministerio Público, junto con expresar su disponibilidad para colaborar con la investigación", puntualiza el escrito.
"El obispo manifiesta su tranquilidad ante la certeza de no estar involucrado en los hechos mencionados en la publicación", concluye la declaración pública.
La publicación de La Tercera destaca que el catastro de casos entregado por la Fiscalía Nacional en agosto pasado sólo mencionaba que había 7 obispos investigados, y que únicamente se tenía certeza de que uno de ellos era el de Santiago, Ricardo Ezzati.
El diario reveló que el obispo Contreras es investigado desde el 28 de junio pasado tras una denuncia presentada por L.A.C.C.. La causa se le asignó al fiscal de San Felipe, Alejandro Bustos. Luego, el 6 de septiembre, el caso fue remitido al fiscal regional de O'Higgins, Emiliano Arias. Este último, según las directrices de la Fiscalía Nacional, está facultado para indagar casos contra sacerdotes que no necesariamente sean de su región.
En esta denuncia contra Contreras, L.A.C.C. dijo que el obispo hace aproximadamente 10 años se presentó en su casa, propiedad que arrienda al obispado. El prelado -según la denuncia- lo habría llevado hasta su residencia, lugar en que habrían ocurrido los hechos, que según su interpretación corresponderían a actos de connotación sexual. Aseguró que esto se repitió por un mes y que en esa oportunidad no sopesó lo ocurrido. Señaló que luego de estos episodios no tuvo más contactó con el sacerdote.
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