La ministra vocera de Gobierno, Cecilia Pérez, manifestó que están estudiando impugnar algunos proyectos que vulnerarían las facultades del Congreso.
La ministra vocera de Gobierno, Cecilia Pérez, confirmó que se está estudiando impugnar al menos 17 proyectos que actualmente se están tramitando en el Congreso, ya que estos sobrepasarían las facultades de los parlamentarios.
La estrategia fue revelada luego del comité político ampliado efectuado este lunes, donde la ministra Pérez reiteró su crítica a los proyectos de la oposición que vulnerarían las facultades del Congreso, argumento que esgrimen contra iniciativas como la que busca reducir la jornada laboral a 40 horas.
"Es algo que se está estudiando, que no se descarta y es propio de las facultades del Poder Ejecutivo", afirmó la ministra.
Desde el Gobierno acusan que no se han respetado las urgencias de ciertos proyectos, y otros han sido tachados derechamente como inadmisibles e inconstitucionales.
Gastón Gomez, abogado de La Moneda adelantó al diario El Mercurio que entre las iniciativas que podrían ser enviadas al Tribunal Constitucional, se encuentran -entre otras- la nulidad de la ley de pesca; el establecer cuotas de género en las elecciones de gobernadores regionales, alcaldes y concejales; y el que moderniza la carrera funcionaria en Gendarmería.
En la oposición criticaron que el Ejecutivo amenace recurrentemente con acudir al Tribunal Constitucional (TC), además de abogar para que avance la modernización del organismo.
Desde las mesas de la Cámara y el Senado contestaron a esta intención del Ejecutivo. El vicepresidente del Senado, Alfonso de Urresti, a pesar de conceder que acudir al TC es una atribución válida, criticó el hecho de que los proyectos no sean analizados en su mérito.
También, reprochó que el Gobierno haga estas amenazas por la prensa.
Mientras tanto, el presidente de la Cámara de Diputados, el demócrata cristiano Iván Flores, aseguró que la Constitución de 1980 le quitó facultades al Congreso y que todas las iniciativas parlamentarias, sean buenas o malas, quedan relegadas.
Bajo este escenario, Flores alega que el Ejecutivo acude indiscriminadamente al Tribunal Constitucional frente a proyectos que no son de su gusto.
Desde Chile Vamos el que se encargó de poner paños fríos fue el jefe de bancada de Evópoli, Luciano Cruz Coke, quien pese a admitir que han tenido problemas con las urgencias y la admisibilidad de ciertos proyectos, hizo un llamado a dialogar para evitar tener que recurrir al TC.
La estrategia del Ejecutivo está actualmente en estudio e involucraría también uno de los proyectos que más polémica y dolores de cabeza le ha generado al Gobierno: el de la reducción de la jornada laboral a 40 horas.
Por este último ya se decidió acudir al TC, sin determinarse aún la fecha y si lo hará exclusivamente el Presidente Piñera o acompañado por Chile Vamos.
En tanto, la indicación sustitutiva del proyecto de flexibilidad laboral sigue trabajándose y se ingresaría al Senado cuando se termine de despachar el proyecto de sala cuna universal.
PURANOTICIA