Se acudirá al veto para revertir el traspié que sufrió el proyecto en el Congreso, ya que si bien la iniciativa fue aprobada, no se definió un monto, lo que hace inviable la promulgación de la ley.
El Gobierno confirmó que acudirá a un veto presidencial para revertir el traspié que sufrió el proyecto de Ingreso Familiar de Emergencia en el Congreso, ya que si bien la iniciativa fue aprobada, no se definió un monto -se rechazó la cifra que propuso el Ejecutivo, de $65.000 pesos per cápita-, lo que hace inviable la promulgación de la ley.
El ministro de la Segpres, Felipe Ward, fue quien hizo el anuncio: "Vamos a ingresar el veto de forma de poder tramitar en la Cámara de Diputados y en el Senado lo antes posible. Esta es la última oportunidad que van a tener los parlamentarios para decir que sí a los 4,5 millones de chilenos que están esperando este veto y esperamos que esto termine por aprobarse".
Conviene recordar que los parlamentarios de oposición se negaron a aprobar el monto, ya que piden al Gobierno que eleve el monto por persona a al menos $80.000, solicitud que desde La Moneda consideraron fuera del alcance, considerando la crisis económica que vive el país debido al covid-19.
"Ese monto es el monto", dijo tajante el ministro de Hacienda, Ignacio Briones, durante el debate, y también añadió que "Chile no es Suecia".
El veto es un mecanismo que consiste en que una vez finalizada la tramitación de un proyecto de ley, y si el Presidente de la República desaprueba dicho proyecto, tiene la facultad de devolverlo a la cámara de su origen con las observaciones convenientes, dentro de 30 días.
Si el Senado y la Cámara Baja aprueban las observaciones del mandatario -quien fijará ya sea el mismo monto o uno nuevo-, el proyecto se transforma en ley y se devuelve al Presidente para su promulgación.
El ministro de Desarrollo Social, Sebastián Sichel, manifestó, a su vez, que "estamos preocupados, porque no hemos logrado que la oposición destrabe su posición original y podamos rápidamente transferir esos recursos a las personas".
"Aquí no se agotan las ayudas, ni es la última ayuda que daremos, sino que básicamente tenemos que tener una estrategia que vaya incorporando a nuevas familias a potenciales ayudas y no concentrarnos sólo en esta", agregó.
Sichel culminó señalando que "no es el tiempo del gallito político, es el tiempo de la solución urgente (...) No me gusta ese lenguaje, que es básicamente el que han instalado algunos parlamentarios de oposición, 'si usted no ofrece más, yo no apoyo el proyecto'".
Aún no se decide si será un veto aditivo (es decir, que agrega un artículo o capítulo) o sustitutivo (o sea, que reemplaza una frase o artículo del proyecto), advirtieron en La Moneda.
PURANOTICIA