La medida había sido criticada por organismos de defensa a los extranjeros en situación irregular, quienes afirmaron incluso que el Gobierno estaba actuando contra la misma ley de migraciones que promovió.
Este domingo, el ministro del Interior, Rodrigo Delgado, acompañado del subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli, se dirigieron al Aeropuerto Internacional Arturo Merino Benítez con el fin de supervisar el operativo de expulsión de más de una veintena de migrantes en situación irregular.
La medida había sido criticada por organismos de defensa a los extranjeros en situación irregular, quienes afirmaron incluso que el Gobierno estaba actuando contra la misma ley de migraciones que promovió.
No obstante, el ministro Delgado defendió la medida, aludiendo a la ligazón de algunos de los deportados con actividades delictuales, señalando que "hay cerca de una veintena de estas personas que están condenadas" por algunos delitos, y que "van a conmutar sus penas con la expulsión" del país.
"Son personas que estuvieron ligadas a tráfico de menores, qué más complejo que traficar menores, o sea, alguien me puede decir si hay algún delito más complejo que ese... creo que puede estar dentro de los cinco que uno podría catalogar como más complejo", afirmó el secretario de Estado, agregando que otros delitos que habrían cometidos los extranjeros expulsados esta mañana son tráfico de drogas, robo con violencia, ingresar de forma ilegal al país, entre otros.
Ante eso, Delgado agregó que como país "tenemos que confiar en estos procesos que se han ajustado a derecho y respetan la dignidad de las personas, se cumple con todos los protocolos" y añadió que espera que los expulsados "puedan rehacer su vida".
Asimismo, el jefe de gabinete se hizo cargo de las críticas de las ONG, quienes acusaron que fue un resquicio por parte del Gobierno hacer este procedimiento un fin de semana, fecha en la que es imposible interponer acciones en favor de los derechos de los migrantes en las diversas cortes.
"No es una excusa, no es un resquicio hacerlo un fin de semana, tiene que ver con disposiciones logísticas, de vuelo, sanitarias, de distinta índole, pero no con una estrategia para poder dejar a alguien afuera", sentenció Delgado.
Cabe recordar que el vuelo gestionado por el Ministerio del Interior, tendrá una escala en la ciudad de Iquique, dado que existen más migrantes irregulares detenidos, provenientes de Antofagasta y Tarapacá, por lo que el vuelo partiría tras la escala a Caracas.
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