La pareja de baile comenzó a competir en el 2016, y dos años después se coronó como ganadora en el Campeonato Nacional Vendimia de Oro, además de obtener el tercer lugar en Danzas Representativas.
Paul Rivera y Pabla Araya son campeones nacionales de cueca del 2018 y llevan toda una vida dedicada al baile nacional. Sin embargo, los efectos de la pandemia también llegaron hasta esta pareja de Copiapó que sólo podrá disfrutar este "18" de su gran pasión desde su casa.
"Estamos acostumbrados a bailar cueca durante todo el año, es algo necesario para nuestras vidas y ha sido súper complicado el mantenerse sin hacer lo que nos gusta", señalaron en entrevista con AgenciaUno, agregando que en esta fecha tendrían su agenda copada de eventos para celebrar las Fiestas Patrias.
Paul Rivera (23) cuenta que comenzó a bailar cerca de los 4 años y desde ahí no ha parado con su afición. "Mis padres bailaban cuecas cuando yo era muy pequeño, aproximadamente 2 o 3 años, y mientras ellos bailaban, a mí me dejaban en una silla sentado esperando que terminaran y ahí empezó mi gusto por el baile nacional", recuerda el joven.
Pabla Araya (25), por su parte, comenzó con esta práctica cuando tenía 10 años. "Llegué al club donde participo actualmente gracias a una tía que le gustaba mucho este ambiente y yo quise seguir sus pasos, así que me llevó a este lugar para poder inscribirme y de ahí ya no paré de bailar", relata.
La pareja de baile comenzó a competir en el 2016, y dos años después se coronó como ganadora en el Campeonato Nacional Vendimia de Oro, además de obtener el tercer lugar en Danzas Representativas.
Posteriormente, el pasado año en esta misma fecha, fue invitada junto a otra pareja por la Embajada de Chile en Inglaterra para celebrar las Fiestas Patrias con los compatriotas que viven en Londres. "Una experiencia maravillosa", cuenta Pabla.
"La Casa Chilena hizo una fonda y fueron muchos chilenos. Nos presentamos durante todo el día, mostramos distintos tipos de bailes, cueca porteña, nortina, un variado baile folclórico a la gente que está allá", agrega Paulo.
No solo para ellos, sino para todo el mundo de la cueca, este año está lejos de ser como los anteriores. Las diversas cuarentenas y las restricciones sanitarias, han hecho que el baile nacional por ahora no sea prioridad.
"Un año normal, a mediados de agosto ya empiezan las presentaciones, los llamados de empresas. Este año lamentablemente no hemos bailado nada", señala Paulo, lamentando que hasta febrero pudieron bailar y lo demás "han sido solo recuerdos".
La dupla de bailarines no oculta su nostalgia por no poder hacer lo que más les gusta y agregan que "aunque sea cansador estar todo el día bailando, se extraña el ambiente de estar con los amigos, estar bailando, porque al final nosotros disfrutamos esto".
Pareja de Baile y de Vida
Si bien, esta joven pareja lleva cuatro años compitiendo por su club Flor del Desierto en diversos concursos nacionales, la relación entre ellos partió mucho antes ya que llevan nueve años de pololeo.
Los dos están ligados con el folclor, ya sea preparando nuevas parejas para competiciones o coordinando eventos con el grupo donde participan. Sin embargo, en estos momentos, cada uno está dedicado a sus estudios.
Junto con compatibilizar su relación de pareja, Paulo estudia Ingeniería Civil hace tres años en La Serena, mientras que Pabla está realizando su tesis en Pedagogía en Inglés.
Recuerdan que se conocieron bailando y que la conexión entre ambos más allá de lo profesional les ha ayudado para sus competencias.
"Para bailar cueca se necesita bastante química, no es solamente que los pasos y la coreografía sean buenos", asegura Paulo.
PURANOTICIA