Los legisladores escucharon durante la mañana a la ministra Ximena Rincón y a representantes de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), la Central Autónoma de Trabajadores (CAT) y la Unión Nacional de Trabajadores (UNT).
Una primera mirada a aspectos como la titularidad de la sindicalización, el derecho a huelga y los efectos en la producción de la negociación colectiva dieron los integrantes de la comisión del Trabajo y Previsión Social del Senado a la propuesta que moderniza el sistema de relaciones laborales.
Los legisladores escucharon durante la mañana a la ministra Ximena Rincón y a representantes de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), la Central Autónoma de Trabajadores (CAT) y la Unión Nacional de Trabajadores (UNT).
La primera en hacer uso de la palabra fue la ministra Rincón, quien mencionó los objetivos de la propuesta sin entrar en detalles. "Con este mensaje nos ponemos al día en la deuda que tenemos como país respecto a la necesidad de impulsar políticas en pro de la equidad", argumentó.
"Si vemos estudios internacionales, llegamos a la conclusión que las empresas que mantienen mejores relaciones con sus empleados valorándolos, tienen mejores resultados productivos. Si queremos alcanzar el desarrollo, debemos pensar en ello", aseguró al terminar su intervención.
Luego fue el turno del presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), Alberto Salas, quien declaró que "manifestamos nuestro discrepancia con la reforma del Gobierno, por lo que hacemos un llamado a que construyan una auténtica agenda laboral".
Sus críticas apuntaron a cuestionar la tesis de que en Chile sería clave fortalecer la sindicalización. "La tasa de sindicalización en nuestro país no es baja como se ha planteado, incluso es mayor que el promedio de la OCDE. El desarrollo no dice relación con este factor, de hecho las naciones que miramos como modelo, han reducido el número de sindicatos", comentó.
A su turno, la presidenta de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Bárbara Figueroa, valoró el texto en tramitación, particularmente los tres pilares de la libertad sindical: el sindicato, la negociación colectiva y derecho a huelga.
Asimismo, hizo un llamado a los senadores a impulsar esta reforma aprobándola con los ajustes realizados en la Cámara Baja, puesto que "se trata de una propuesta mínima, queremos que se avance y no se retroceda".
"Donde hay empresas con sindicatos existe un respeto de los contratos colectivos. Esto no es trivial. También quiero desmentir lo que se ha dicho que este proyecto afectará a las pymes porque no es así. En las medianas y grandes empresas es donde tendrá implicancias", garantizó la dirigente junto con criticar "la actual asimetría de poder entre las partes (empleador y empleado) porque hoy es la empresa quien fija las reglas del juego".
En tanto, el presidente de la Central Autónoma de Trabajadores (CAT), Óscar Olivos, afirmó que el texto, a pesar de los cambios que se hicieron, no empareja la cancha que es lo que buscamos". En relación a la huelga, "la iniciativa la circunscribe a la negociación colectiva y parece ignorar con los derechos de los trabajadores", indicó.
El presidente de la Unión Nacional de Trabajadores (UNT), Alejandro Steilen, dijo la reforma tiene dos ejes fundamentales: no reemplazo en huelga y la titularidad sindical. "Quiero pedir que se termine con el temor que se ha generalizado respecto a que si el proyecto se vuelve ley el empleo será precario, eso no es verdad", aclaró.
"Sin esos ejes una reforma no tiene sentido. Respeto a los políticos y espero de ellos esa seriedad porque son representantes del pueblo. Espero coherencia en esta tramitación cuando se habla de los derechos de los trabajadores", concluyó.
Pn/co
ATON CHILE