Isidro Solís manifestó que la determinación de la Corte de Suprema es una "frustración".
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El abogado Isidro Solís, defensor del removido juez de Rancagua, Marcelo Vásquez, manifestó que la determinación de la Corte de Suprema es una frustración, indicando que las faltas cometidas por el exmagistrado no eran graves, acusando a la fiscalía de condicionar la decisión del máximo tribunal.
"Es una decisión que para nosotros constituye una frustración. Estábamos convencidos de que la faltas administrativas que se le han imputado al ministro Vásquez (Marcelo) no tenían la gravedad ni la entidad suficiente para justificar una medida tan extrema como la remoción", dijo el abogado.
Solís sostuvo que estaban confiados en la resolución de la Suprema tras revisar jurisprudencia sobre remociones, además de creer "en principio esencial de la justicia que es el principio de la proporcionalidad".
El defensor también criticó el accionar del Ministerio Público, acusándolo de usar canales informales de comunicación para condicionar la votación de la Suprema.
"La actividad de los últimos días -del Ministerio Público- de haber tomado la decisión de anunciar la formalización o solicitud de formalización a 72 horas de la audiencia, claramente no tenía otra finalidad que impactar y condicionar la resolución de la Corte Suprema", manifestó Isidro Solís.
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