La razón de la querella se funda en agresiones y calumnias contra el vocero del Movilh, Rolando Jiménez, quien presentó la denuncia.
541 días de presidio arriesga el "pastor" Javier Soto tras una querella por agresiones que le presentó el vocero del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), Rolando Jiménez.
El pastor evangélico negó ayer en la audiencia haber violentado a Jiménez, pese a que si lo reconoce, la pena disminuiría a 61 días máximo de presidio.
A la salida de tribunales Soto volvió a increpar a Jiménez por lo que éste último indicó que el evangélico ha realizado "acusaciones siniestras en contra de mi persona y de la institución a la que yo pertenezco". "Esperamos la audiencia en marzo y esperamos que este tipo termine en la cárcel, que es el único lugar donde él puede terminar", agregó Jiménez.
Al respecto, Soto explicó que los argumentos de su defensa responden una decisión "correcta, porque nosotros los chilenos no somos cobardes. Nosotros tenemos que dar la cara y yo de un principio he dado la cara y seguiré dándola". Además aclaró que seguirá "enrostrándole al señor Rolando Jiménez en su misma cara su perversión y su inmundicia", y añadió que "no me voy a arrancar ni atemorizar, menos por Rolando Jiménez, es muy barato este hombre".
Añadió que "me da fuerzas a mí es seguir predicando el evangelio y si hay que ir a predicarle ahora a los reos, le predicamos".
El juicio oral se realizará el 27 de marzo en el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago.
AGENCIA TRAYECTOS
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