Terminado el proceso financiero de la compañía, los bancos, en tanto, se quedarán con el 13 % del retailer.
En los próximos meses y tal como está previsto, la estructura de propiedad de La Polar cambiará radicalmente. Según el acuerdo alcanzado entre los accionistas y acreedores, éstos últimos pasarán a tener el 66,6 % de la cadena de multitiendas, mientras el porcentaje restante quedará en manos de los actuales accionistas de la firma.
La semana pasada, el retailer le detalló a los inversionistas cómo será la estructura accionaria de la empresa, luego de que todos los acreedores capitalicen su deuda, para lo cual la empresa se encuentra avanzando en la emisión de un bono convertible en acciones que será respaldado por un aumento de capital por 1.997.235.044 de títulos. Hoy, la firma tiene 998.617.522 papeles en circulación.
Tras este proceso, las AFP pasarán a tener un cuarto de la propiedad de la compañía. Si hoy -de la mano de Habitat- alcanzan el 7 %, con la capitalización pasarán a tener, entre todas, el 24 %. Esto, puesto que hay varias AFP -básicamente Habitat, Cuprum y Provida- que tienen el 33 % de la deuda total. Puntualmente, manejan el 35 % de la deuda senior (lo que las hace propietarias de 581.209.108 acciones), y el 22 % de la deuda junior o 71.386.006 títulos. En total entonces sumarían 652.577.114 papeles, los que añadidos al 7 % actual (69.344.945), derivaría en un 24 % del retailer.
La ley establece que cada una de las AFP no puede tener individualmente más del 7 % de la propiedad de una compañía, ni tampoco un porcentaje superior al 3 % del valor del fondo invertido en una sociedad. Dado esto, es probable que tras la capitalización algunas AFP excedan esos límites. Sin embargo, los acreedores tienen un plazo de tres años para capitalizar, por lo cual las administradoras tendrían el tiempo suficiente para ir manejando esos niveles.
Situación similar experimentarían los bancos. Culminado el proceso de reestructuración financiera, las entidades alcanzarían el 13 % de la compañía, llegando a las 399.530.131 acciones. Esto, puesto que administran en torno al 20 % de la deuda de La Polar.
La normativa prohíbe que los bancos tengan acciones de empresas. Sin embargo -explican en la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras (SBIF)- como esto responde a la necesidad de pagarse a través de los títulos, la legislación da un plazo de seis meses para que estos papeles sean enajenados. Los títulos deben venderse en el mercado secundario formal (en rueda o remate en una Bolsa de Valores), a menos que la superintendencia autorice a hacerlo vía licitación pública. El plazo podrá extenderse hasta los 18 meses previa solicitud a la SBIF y en casos justificados.
Fuerte dilución
Tras la reestructuración financiera, las corredoras seguirán siendo las principales accionistas de La Polar. Sin embargo, su peso se verá fuertemente reducido. Si hoy tienen el 57 %, pasarán a manejar el 34 % con 1.029.686.180 acciones. Esto, resulta de los papeles que administran hoy, más cerca del 23 % de los bonos.
En la misma línea, ILC -a través del 5 % de Corpvida y el 5 % de Corpseguros- bajará su participación desde su actual 10 % a sólo 3 % (99.711.749 acciones), mientras que Moneda disminuirá su peso de 6 % a 4 % (111.365.312) de la propiedad. Estos últimos manejan el 2 % de la deuda de la multitienda.
Existirá un 21 % restante centrado básicamente en pequeños accionistas que no están reflejados en los otros grupos. A fines de septiembre, la compañía le pidió autorización a la SVS para inscribir la emisión de bonos convertibles en acciones y el aumento de capital.
Una vez aprobados los prospectos, se abrirá el período de opción preferente para accionistas, y luego de esos 30 días, empezará el canje, lo que podría ser a fin de año.Valor Futuro