Centenares de opositores haitianos recorrieron hoy las calles de Puerto Príncipe en dirección al emblemático parque Campo de Marte, situado frente al Palacio Nacional, para exigir la renuncia del presidente del país
Puerto Príncipe, 8 ene (EFE).- Centenares de opositores haitianos recorrieron hoy las calles de Puerto Príncipe en dirección al emblemático parque Campo de Marte, situado frente al Palacio Nacional, para exigir la renuncia del presidente del país, Michel Martelly, en medio de la crisis política que vive el país.
La manifestación, que se desarrolló con la escolta de la Policía haitiana por varias calles del centro de la capital, comenzó en el Boulevard la Saline, periferia norte, en las ruinas de la iglesia San Juan Bosco.
Organizaciones políticas opositoras en Haití anunciaron esta semana que hoy y los días 10 y 11 de enero protagonizarán la fase final de la serie de protestas que han llevado a cabo en las calles en medio de una intensa crisis política.
"Pedimos la dimisión de Martelly", expresaban los manifestantes.
Mientras, el jefe de Estado ha mantenido reuniones entre ayer y hoy con representantes de varios partidos políticos y senadores, en el marco de las negociaciones para encontrar una solución a la crisis, según ha mostrado a través de las redes sociales con fotografías, aunque sin valorar dichos encuentros.
En tanto, el presidente del Senado, Simon Dieuseul Desras, dijo que la sesión especial de la Asamblea Nacional, que debió celebrase ayer y fue pospuesta, podría tener lugar mañana.
Los representantes de los tres poderes del Estado firmaron el 29 de diciembre pasado un pacto en el que establecieron una serie de compromisos, entre ellos, prolongar los mandatos de los diputados hasta el 24 de abril y de los senadores hasta el 9 de septiembre, ya que terminaban el próximo 12 de enero.
Según lo pactado, el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial tendrán solo hasta el 12 de enero próximo, fecha en la que también vencerá el acuerdo tripartito, para llevar a cabo los compromisos asumidos en el mismo, ya que de lo contrario quedará anulado.
El país, el pasado 5 de enero, tropezó con un primer escollo en sus intentos por normalizar la situación política cuando la Asamblea Nacional fracasó en reunir el quórum necesario para abordar los asuntos del acuerdo tripartito, entre los que estaba la ratificación de la política estratégica de Evans Paul, primer ministro designado por decreto por Martelly, y la votación de la Ley Electoral.
Algunos senadores, según informan lo medios locales, requieren de la formación del Consejo Electoral Provisional (CEP) antes de la votación de la Ley Electoral.
Además, quieren enmendar el artículo 7 del acuerdo tripartito, según el cual, en el caso de incumplimiento de cualquiera de los puntos, da el poder al presidente Martelly para actuar en consecuencia.
"El incumplimiento de una de las cláusulas contenidas en el presente acuerdo acarrea su invalidez con todas las consecuencias de derecho. El presidente de la República, jefe del Estado, velará por la estabilidad de las instituciones, garantizará el funcionamiento de los poderes públicos, así como la continuidad del Estado, de conformidad con la Constitución", sostiene el texto firmado. EFE
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