Más de 350 cartas fueron escritas entre ambos, en muchas de las cuales expresan sus profundos sentimientos.
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Esta reveladora historia, desconocida hasta hoy, será exhibida próximamente en un documental en la BBC.
"Buscaba desde el año pasado una respuesta para estas palabras tuyas: 'te pertenezco'. Y finalmente, antes de dejar Polonia, he encontrado la forma, un escapulario. La dimensión en la que acepto y te siento en todas partes y situaciones, cuando estás cerca y cuando estás lejos". Son palabras escritas por Karol Wojtyla el 10 de septiembre de 1976, dos años antes de ser ordenado Papa y convertirse en Juan Pablo II.
Su destinataria era la filósofa estadounidense de ascendencia polaca, Anna-Teresa Tymieniecka, una mujer casada y que más tarde se convertiría en madre de tres hijos.
Líneas como aquella, contenidas en cientos de cartas halladas en la Biblioteca Nacional de Polonia, por el periodista Edward Stourton, revelan la intensa amistad que ambos compartieron por más de 30 años. Eso sí, no hay en evidencias de que el Sumo Pontífice rompiera el voto de celibato.
Por su parte, la BBC tuvo acceso a algunas de las cartas escritas por Juan Pablo II, pero no así a las que eran destinadas hacia él mismo.
Además, existen fotos que dan veracidad a esta relación de amistad, la cual comenzó en 1973 cuando Tymieniecka se contactó con el futuro Papa, el cardenal Karol Wojtyla, por un libro de filosofía que él había escrito.
En ese entonces, la mujer tenía 50 años y viajó de Estados Unidos a Polonia para comentar el texto.
Poco después, ambos empezaron a intercambiar cartas, cada vez con un contenido más íntimo; a la vez que decidieron trabajar juntos en la redición del libro "Persona y acción", escrito por Wojtyla sobre el actuar humano y publicado en 1969.
El esposo de Tymieniecka, en tanto, era Hendrik Houthakker, un distinguido economista de Harvard que, tras el colapso del comunismo, aconsejó al Papa sobre temas de economía. Y en reconocimiento de aquello, se le concedió el título de caballero papal.
La última carta recibida por la filósofa fue escrita unos meses antes de la muerte de Juan Pablo II, el 2 de abril del 2005, luego de un pontificado de casi 27 años. Teresa, por su parte, falleció en el 2014, sólo unos meses después de que el Pontífice fuera canonizado.
Respecto a esta canonización, se desconoce si la Santa Sede tuvo acceso o no a estas cartas antes de llevarla a cabo.
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