El grupo terrorista Boko Haram secuestró desde el año pasado a más de 2.000 mujeres y niñas en Nigeria, según un informe presentado hoy por Amnistía Internacional (AI).
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Los islamistas sunitas convirtieron a muchas de esas mujeres en esclavas sexuales, las obligaron a casarse con ellos o a combatir, explica la organización de derechos humanos.
El informe se basa en entrevistas con 200 testigos, entre ellos 28 mujeres y adolescentes que estuvieron secuestradas por el grupo terrorista.
Una de ellas, Aisha, contó cómo durante los tres meses que estuvo secuestrada fue violada en varias ocasiones, alguna vez hasta por seis hombres. La joven de 19 de años tuvo que presenciar como Boko Haram mataba a más de 50 personas, entre ellas su hermana. "Los tiraron a una fosa común entre los arbustos", explicó a AI.
El informe se publica cuando se cumple el año del secuestro de más de 200 estudiantes, la mayor parte de ellas cristianas, de una escuela de Chibok. Desde su desaparición no volvió a tenerse noticia de ellas.
Los extremistas sunitas de Boko Haram quieren establecer un estado con una interpretación estricta de la ley islámica. En las zonas que están bajo su control, los habitantes que se niegan a cumplir con las oraciones musulmanas diarias son azotados, afirma el informe de AI.
Según los testigos, también llevan a cabo lapidaciones. Mustapha Saleh, de 15 años, contó cómo tuvo que participar en la lapidación pública de cinco hombres y cinco mujeres en la pequeña ciudad de Bama. "Hicieron venir a los vecinos y les ordenaron la lapidación", relató.
Según AI, nuevas imágenes satelitales muestran el alcance de la destrucción tras un ataque de Boko Haram en el noreste del país. Al menos 5.900 edificios (el 70 por ciento de la ciudad) quedaron destruidos o dañados, mientras que las calles quedaron repletas de cadáveres. En enero ya se difundieron imágenes de satélite de un ataque contra Baga que provocaron indignación a nivel internacional. En el ataque murieron cientos de personas.
Las fuerzas de seguridad nigerianas -apoyadas por las de Chad, Camerún y Níger- reportaron numeros avances en la lucha contra Boko Haram desde febrero. Pero están lejos de haber vencido a los fundamentalistas.
"Los secuestrados tienen que ser liberados y hay que investigar los crímenes de guerra y contra la humanidad", reclamó el secretario general de AI, Salil Shetty, quien pidió al gobierno nigeriano que proteja a la población civil y lleve ante la justicia a los responsables.
Según los cálculos, desde 2009 murieron al menos 14.000 personas por ataques y antentados de Boko Haram, mientras que 1,5 millones tuvieron que huir.
pn/kf
DPA
