La actriz mexicana en medio de una sesión fotográfica en una piscina sufrió un percance con su vestido negro. Sin embargo, salió al paso con humor.
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Salma Hayek es otra de las divas por donde los años no pasan. A sus 48 años, la actriz mexicana luce increíble y lo dejó en evidencia en su última sesión fotográfica en Los Ángeles, donde estuvo a punto de sufrir un bochorno.
Y es que la mexicana luego de salir de la piscina, su vestido negro strapless, el peso de este hizo que se deslizara por su anatómica figura y por muy poco no dejó al descubierto sus senos, si no es por su rápida intervención de manos para cubrirse, lo que tomó con humor.
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Pn/gm
Texto: Agencia Trayectos.
