El futbolista fue el nuevo invitado del programa de entrevistas de Martín Cárcamo, "De Tú a Tú".
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La noche de este jueves en un nuevo capítulo "De Tú a Tú" fue el turno de Mauricio Pinilla, quien fue el invitado al programa de Martín Cárcamo para repasar diversos hechos de la vida del futbolista.
El exdelantero de Universidad de Chile, si bien tiene una vida llena de éxitos y buenos momentos, también contó que lo pasó muy mal, en la etapa más temprana de su carrera sufrió una profunda depresión, la que lo tuvo bastante complicado.
"Tuve que dejar de jugar, me retiré, entré en una depresión horrible, con una crisis de pánico", empezó relatando, incluso agregó que por ese tiempo debió terminar la relación que mantenía con su mujer Gisela Gallardo.
"De un día para otro, me sentí ahogado, no podía respirar, era una sensación de muerte, me moría, estuve hasta pensando en cambiarme de casa, porque vivía en un departamento, no podía, me ahogaba... más encima me separé y ahí me quedé solo", contó Pinilla.
"Llegó un momento de tanta desesperación que ni siquiera podía dormir, andaba con las pulsaciones a 200 por hora, me sudaban las manos. Quería dejar de jugar, mandar todo a la cresta", añadió, relatando un duro episodio que debió enfrentar mientras se encontraba jugando en Escocia.
"Me arranqué del club, sin decirle a nadie. Apagué los teléfonos y me vine a Chile y el presidente del club me vino a buscar. Eso nunca lo he contado, estaba nublado, me sentía pésimo, angustiado, estaba con depresión, ansiedad, mi cabeza no estaba preparada para tomar ningún tipo de decisión e hice mi maleta y me vine a Santiago para estar cerca de mis papás. Me aferré a ellos a mi familia", detallo el seleccionado nacional.
"A los 10 días llega el presidente del club, me dice que me querían ayudar, que tenían un plan de trabajo, que si confiaba en ellos, iban a poner todo de su parte para que volviera. Volví y me fracturé la muñeca", rememoró Mauricio, lo que lo dejó con una depresión aún más profunda.
"No podía dormir, tenía una sensación de vacío, no tenía hambre, no comía. Y 'chupaba'. Lo peor en una depresión es tomar alcohol. Nunca tuve problemas con el copete, pero sí me escondí en eso", explicó.
En ese momento el futbolista reveló que se debió internarse en una clínica psiquiátrica: "Estuve internado en una clínica psiquiátrica dos semanas, con actores y actrices muy famosos. Era un hotel cinco estrellas, pero con medicamentos y actividades todo el día".
"Los primeros días lo pasé pésimo. No quería interactuar, no me abría, no ayudaba en las terapias y ahí me di cuenta que estaba tirando mi vida a la basura, porque no quería a nadie al lado. Estaba enfermo", le confesó el futbolista en la íntima entrevista a Martín.
Para finalizar Mauricio afirmó a Cárcamo que hubo un hecho que logró hacerlo cambiar de pensamiento: haberle pedido matrimonio a Gisela Gallardo, su actual esposa y madre de sus tres hijos.
PURANOTICIA
