Se trataría de un grupo de sus trabajadores de mantenimiento y limpieza en su mansión ubicada en Hidden Hills.
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La celebridad estadounidense Kim Kardashian se encuentra en el centro de la polémica, ya que un grupo de sus trabajadores de mantenimiento y limpieza de su mansión en Hidden Hills habrían presentado una demanda en su contra.
Esto debido a que la acusan de el no pago del sueldo acordado, además de otros incumplimientos, como sus respectivos descansos para comer. Ante esto, Kim decidió responder, asegurando que ella no era la responsable.
La denuncia fue interpuesta por siete trabajadores de la también empresaria, quienes afirmaron haber sido contratados a tiempo completo, y que luego les habrían compensado como "contratistas independientes", según dicen los documentos legales publicados por TMZ.
Los papeles legales también constatan que los ex empleados de Kim también acusan no haber recibido los recibos de sus pagos, que no existía una forma de registrar sus horas de desempeño, no contar con pausas para la alimentación, no remuneración de horas extras, además de no recibir los reembolsos de sus gastos.
Por otro lado, otro de los empleados aseguró haber sido despedido por exigir sus derechos, y los de su hijo de 16 años, quien "trabajaba más de las horas máximas permitidas para un menor de edad según la ley laboral de California".
Ante estas acusaciones, un representante de la magnate explicó su versión de lo ocurrido a TMZ, donde aseguró que ella "contrató a un proveedor externo para los servicios de mantenimiento y limpieza, y no está al tanto del acuerdo hecho entre el proveedor y los trabajadores".
Por lo que Kim asegura que "no es responsable de cómo el proveedor administra su negocio y de los acuerdos que ha hecho directamente con su personal".
"Kim nunca ha dejado de pagar a un proveedor por sus servicios y espera que el problema entre estos trabajadores y el proveedor que los contrató pueda resolverse pronto de manera amistosa", cerró el vocero de la familia.
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