El futbolista contó que debió someterse a un tratamiento para dejar el alcohol tras padecer una parálisis en plena calle.
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Sin duda fue uno de los futbolistas más faranduleros y buenos para la fiesta de todos, apodándose como el "rey de la noche".
Sin embargo, la vida de alcoholismo, fiesta y violencia intrafamiliar que vivió con su ex pareja Roxana Muñoz, quedó en el pasado.
Kike Acuñe confesó la noche de este martes en el programa Más vale tarde, que hubo un episodio que lo llevó a recapacitar.
Cuando iba caminando con su hija a tomar helados, luego de haberse tomado dos pisco sour se le paralizó la parte izquierda del cuerpo y se cayó; donde notó que el cuerpo ya no le funcionaba.
"Iba con mi hija. Me tomé dos pisco sour al almuerzo. Agarro el coche para ir a los juegos y se me trabó la parte izquierda del cuerpo y me caí. Me paré y me caí de nuevo. No me funcionaba, no podía dar el paso siguiente. No tengo explicación, fue algo que me remeció. Pensé que me iba a morir", confesó Acuña.
Luego de eso, con mucho esfuerzo tomo su celular y llamo a Daniel Fuenzalida, quien le recomendó someterse a un tratamiento para dejar el alcohol, el que sirvió para retomar su vida normal.
"Era un tratamiento ambulatorio, de ocho y media a dos de la tarde. Llegué con mi autoestima por el suelo y mis compañeros me hicieron dar cuenta que valía mucho como persona y que con esfuerzo se podía salir adelante", explicó al Late.
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