El delantero chileno fue el máximo anotador del torneo continental con seis tantos, superando a Messi e Higuaín.
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Gran Copa América de Chile, coronada otra vez con el título, como hace un año y frente al mismo rival, Argentina. Y, como hace un año, también fue cimentada en la actuación individual de algunos de sus jugadores.
Claudio Bravo, el capitán, fue elegido el mejor arquero, a pesar de haber tenido un par de errores en la primera fase. Arturo Vidal, el cerebro y el alma del equipo, también brilló, al igual que Alexis Sánchez, la punta de lanza de La Roja.
Pero si hay uno que se destacó por lo letal, ese fue Eduardo Vargas. El delantero convirtió seis tantos en el torneo, cuatro de ellos ante México en el histórico 7-0, para terminar como goleador del certamen, aventajando a los argentinos Lionel Messi (5) y a Gonzalo Higuaín (4).
Torneo consagratorio para el atacante del Hoffenheim alemán, quien se ganó definitivamente el puesto de centrodelantero que tanto le hacía falta a Chile en los últimos años.
