Al momento de argumentar la cartulina roja a ‘Pajarito’, el juez del ‘derby’ escribió que “a raíz de una supuesta falta no sancionada en su contra, corre en mi dirección reclamando airadamente, y con ese afán interrumpe mi línea de carrera produciendo contacto físico con mi persona lo cuál me hace trastabillar”.
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El árbitro del superclásico disputado el sábado en el Estadio Monumental, Eduardo Gamboa, informó de un "contacto físico" y no de una "agresión" a la hora de explicar la expulsión de Jaime Valdés sobre el final del duelo que terminó con triunfo de los albos por 2-0.
Al momento de argumentar la cartulina roja a 'Pajarito', el juez del 'derby' escribió que "a raíz de una supuesta falta no sancionada en su contra, corre en mi dirección reclamando airadamente, y con ese afán interrumpe mi línea de carrera produciendo contacto físico con mi persona lo cuál me hace trastabillar".
Además, Gamboa descarta en su informe algún insulto del mediocampista de largo recorrido por el Calcio italiano, por lo que podría ser absuelto de cara al pleito de este sábado ante O'Higgins por la duodécima fecha del Apertura.
En el escrito, incluso, el colegiado relata lo que ocurre con Valdés ya finalizado el pleito en Pedrero: "Una vez en vestuarios llega a zona de camarines el Sr. Patricio Barahona con el jugador expulsado (Valdés). El jugador pide explicaciones por su expulsión, y yo amablemente le explico que no puedo darle explicaciones".
"A Barahona le pregunto el porqué llega con el jugador expulsado a camarines, ya que eso estaba prohibido, se excusa diciendo de que había traído al jugador al Doping y que el jugador quiso pasar a conversar conmigo", añade.
En otra incidencia, Gamboa consigna que "en el minuto 81 cuando se produce el segundo gol de Colo Colo el público de la zona Tribuna Pacifico lanza una gran cantidad de pañales sucios a la banca de U. de Chile y otros al terreno de juego".
Por último, el juez relató lo acontecido con el entrenador de Universidad de Chile, Martín Lasarte, quien recibió en los minutos finales un proyectil en su cabeza. "Detengo momentáneamente para saber su condición y me dice que todo estaba bien y que continuara con el juego sin preocuparme", sentenció.
Pn/ci
AGENCIA UNO
