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El entrenador de Sevilla confesó que la pasó mal en los días en que lo llamaron para agarrar la Albiceleste.
El sueño de mi vida. Esta selección, con estos futbolistas y con Messi en particular es un sueño pero, bueno, a veces los sueños no se dan". Nada suena más cruel que un sueño perdido. Jorge Sampaoli tiene la voz siempre rasposa y así le contesta al diario Récord, sin dudarlo, sin esconderse. Es que una semana después de que firmara su llegada a Sevilla, Gerardo Martino dejó el cargo en la Selección argentina y lo llamaron. Salir de ahí sería muy difícil y lo fue. Pero, aún así, no lo esconde.
- ¿El sueño de tu vida, pese al escándalo que es la AFA?
- Sin dudas. Ser argentino tiene eso y me metería en la vorágine diaria de pelearme seguramente, pero me hubiera gustado, desde mi lugar, meterme a intentarlo. Tratar de generar cosas en pos del bien del futbol argentino, o de mi país, sabía que era difícil como lo fue siempre pero me voy a gusto. De verdad. Me seduce representar a mi país.
Las cosas, sin embargo, le han salido muy bien a Sampaoli en Sevilla y, quizás, vaya a tener revancha. Aún así, difícilmente se saque la nostalgia.
- ¿En plena pretemporada con Sevilla te llegó el llamado?
- Así es. Habiendo elegido a mis refuerzos y, en pleno trabajo. Si esa propuesta se hubiera dado una semana antes, mi actualidad sería otra y estaría en la selección de Argentina. Sencillamente, porque fue mi deseo toda la vida. Pero soy un hombre de palabra y mi compromiso con el Sevilla debía cumplirlo. Fue imposible desde el minuto uno.
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